Tres pasos de peatones situados en la calle Esperanza de Barriomar han sido los protagonistas de las conversaciones y bromas vecinales durante los últimos días. El Ayuntamiento de Murcia ordenó el repintado de los pasos de cebra. Hasta aquí todo entraría dentro de la normalidad.

Lo llamativo de la situación salta a la vista al comprobar que estas sendas peatonales tienen poco o ningún sentido ya que no guían al transeúnte a ninguna parte. Dos de ellos cruzan la carretera para acabar frente al vallado de un huerto y el tercero choca contra el muro exterior de una vivienda.

Los vecinos de Barriomar critican que se hayan repintado estos pasos de peatones, que tienen poca o ninguna utilidad, mientras siguen reclamando a diario mejoras en su barrio relacionadas con la accesibilidad, la limpieza o la integración con el resto de la ciudad.

Un usuario de Twitter lamentaba en redes sociales que le hubieran puesto una denuncia por haber dejado el coche encima del paso de cebra. Además, añadía que en la multa el agente de Policía le indicaba que "constituía un riesgo para los peatones".

Por su parte, el Partido Popular de Murcia no dejaba escapar la ocasión para tachar de "ridículo" y de "torpeza del nuevo gobierno" el repintado de estos pasos de cebra.

En respuesta al PP municipal algunos usuarios le recordaron que la urbanización en la que están las sendas peatonales se construyó en el año 2009, cuando gobernaba en el Ayuntamiento de Murcia el PP con Miguel Ángel Cámara al frente, y que fue la promotora la que levantó las calles y pintó las señales de tráfico