Corría el año 2009 y era alcalde el popular Miguel Ángel Cámara cuando el Ayuntamiento anunciaba que el barrio del Espíritu Santo de Espinardo, zona tristemente conocida por la marginación, el tráfico de estupefacientes y las redadas policiales para combatirlo, iba a experimentar «una remodelación integral gracias al Plan Urban». Según contaban entonces desde el Consistorio capitalino, se iba a poner en marcha una «ambiciosa actuación, que mejorará la calidad del entorno urbano y las condiciones de habitabilidad de los ciudadanos», y que incluía, entre otras iniciativas, la construcción de un pabellón deportivo, la rehabilitación de los principales espacios públicos del barrio, la ampliación del centro de servicios sociales y la creación de un centro de producción artística y creativa, un vivero de empresas culturales.

Doce años después de aquello, el vivero está levantado y tiene su cartel en letras negras sobre fondo blanco: ‘Centro de creación y producción artística y vivero de empresas culturales’. En caracteres más pequeños, justo a continuación, se lee: ‘próxima construcción’.

Y es que el vivero en cuestión, denuncian los vecinos de la zona, es poco más que un solar lleno de basura, un lugar insalubre en el que no hay creatividad, sino inmundicia.

Afirman los residentes en la población que el inmueble, ubicado en la calle Barcelona, frente a la plaza de la Constitución, se encuentra a medio construir y «en estado de abandono». Se ven plásticos, botellas, bolsas negras de basura y latas de cerveza, entre otros enseres muy sucios.

Ironizan con cuál es el resultado de «exitoso Plan Urban» antaño anunciado a bombo y platillo y recuerdan que el lugar es propiedad del Ayuntamiento de Murcia, por lo que esperan que el recién estrenado equipo de Gobierno municipal, con el socialista José Antonio Serrano a la cabeza, se ponga manos a la obra y limpie este espacio. A preguntas de esta redacción, desde el Ayuntamiento de Murcia apuntaron que «se está estudiando» cómo proceder al saneamiento del lugar, el cual se encuentra ahora mismo vallado. Se ha de concretar qué servicio y cómo se encargará de la limpieza, lo cual se prevé acordar en breve.