Los operarios continuaban ayer con la instalación de las nuevas zonas infantiles, incluido ‘El Limonero’, en el Malecón. | ISRAEL SÁNCHEZ

El nuevo parque infantil pone en pie de guerra a los vecinos del Malecón

El nuevo parque infantil pone en pie de guerra a los vecinos del Malecón

Las reformas que el Ayuntamiento de Murcia está llevando a cabo en el jardín botánico del Malecón están en el punto de mira de los vecinos de la zona. Esta emblemática zona verde de la capital ha pasado ya por varios ‘lavados de cara’ pero las últimas obras van encaminadas a mejorar los accesos y a renovar e instalar nuevas estructuras en las plazas y parques infantiles del jardín. Los vecinos se muestran claros con respecto a estas últimas actuaciones: La intervención aprobada por el anterior equipo de Gobierno va contra la Ley de Patrimonio Cultural de la Región de Murcia.

Incluido en el entorno del Paseo del Malecón, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), la Asociación de vecinos del Malecón y su Huerta ha reclamado a la nueva corporación municipal la paralización inmediata y cautelar de las obras que se están llevando a cabo, así como suprimir del proyecto de reforma del jardín las estructuras incluidas en las zonas infantiles que suponen «un gran impacto en un entorno BIC y se apueste por incrementar el arbolado y los espacios verdes para colecciones de plantas». Este jueves los integrantes de dicha asociación mantendrán una reunión con la nueva concejala de Pedanías y Barrios, Recursos Humanos y Desarrollo Urbano, Ainhoa Sánchez, a la que pedirán una modificación del proyecto.

Estos días los operarios de la empresa encargada de las obras están instalando un juego infantil que evoca a un limonero en una de las plazas al final del jardín del Malecón, al igual que otras grandes estructuras que implican la cimentación de un suelo «irrecuperable en el futuro si se quiere dar marcha atrás al proyecto», sentencia la asociación. Los vecinos recuerdan que la ley de patrimonio señala que las intervenciones en el entorno de los monumentos BIC «no podrán alterar el carácter arquitectónico y paisajístico de la zona, salvo que sea degradante para el monumento, ni perturbar su contemplación o atentar contra la integridad del mismo».

Pese a que la anterior corporación de Gobierno aseguró que cuenta con todos los permisos de la dirección general de Bienes Culturales de la Comunidad, «el proyecto para la instalación de un limonero metálico gigante no concuerda con lo expresado en la ley, y más si tenemos en cuenta que se va a colocar a escasamente 20 metros del Paseo del Malecón, afectando al carácter paisajístico de la zona y perturbando la contemplación del monumento. Se trata pues de un elemento discordante que va a afectar negativamente al bien de interés cultural», menciona Patrocinio López, presidenta de la Asociación de Vecinos del Malecón.

Preocupa el resto de actuaciones en el jardín botánico. Aunque el proyecto de remodelación contempla la plantación de decenas de especies resistentes y adecuadas al clima de la Región, como menciona el proyecto, los vecinos temen la desaparición de alguno de los emblemáticos ejemplares del arbolado del Malecón.