Agentes de la Policía Nacional detuvieron el día de Año Nuevo a un hombre de 35 años que pinchó las cuatro ruedas de un coche que estaba aparcado junto a unas viviendas de Aljucer (Murcia) a las que tiene prohibido acercarse desde que, supuestamente, prendió fuego a unos matorrales próximos y puso en peligro la vida de sus moradores.

Los hechos que motivaron esa nueva detención de J.A.R. fueron descubiertos por el dueño del automóvil y su esposa, que persiguió en un ciclomotor al coche en el que el presunto vándalo había emprendido la huida.

Cuando los agentes policiales acudieron al lugar, el marido recibió la llamada de ella, que le alertaba de que el presunto autor de los hechos se encontraba en una gasolinera, donde fue detenido por los policía al coincidir su vestimenta y otros datos físicos con los de la persona que se veía en las imágenes captadas en el momento en que pinchaba las ruedas.

El perjudicado aseguró a los agentes que se había visto obligado a instalar unas cámaras de seguridad ya que hasta en cuatro ocasiones anteriores había sufrido los pinchazos en las ruedas de su coche.

Al detenido se le ha unido una nueva causa penal, en este caso, por un presunto delito de daños y otro de quebrantamiento de medida cautelar, ya que desde en junio de 2020 tenía prohibido acercarse a menos de 300 metros de varias viviendas de la zona.

Esa medida se acordó por el juzgado tras el incendio de los matorrales próximos a las mismas, ocurrido el 12 de junio de 2020, en el que incluso llegó a arrojar, presuntamente, una bombona de camping gas a las llamas.

La fiscalía pide por esos hechos dos años de cárcel por un delito de incendio, otro año por un delito de amenazas y nueve meses por otro de resistencia, además de alejamiento por tres años posteriores al cumplimiento de las penas de prisión.