«Han sido 16 años de trabajos forzados», comenta el promotor José López Rejas sobre su proyecto para hacer un lavado de cara integral a la barriada de La Paz, una de las zonas más deprimidas de la capital murciana que, con la reforma que el empresario tiene previsto, prevé revalorizarse.

Mañana, lunes, a primera hora de la mañana, está previsto «meter las máquinas de ensayo» que llevarán a cabo «los sondeos para calcular definitivamente la cimentación que tiene que llevar, para la estructura de las dos torres que van en el solar de la guardería», confirma López Rejas. Por el derribo de esta escuela infantil, el gestor del proyecto para la reconstrucción de La Paz llegó a estar imputado en una causa judicial. La causa en cuestión finalmente fue archivada y el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Murcia decretó el sobreseimiento respecto de todos los investigados.

Su proyecto, respaldado ahora por la constructora Dragados y el Grupo Porcelanosa, se ha topado, a lo largo de los años, con diversas dificultades, a las que en este 2020 se unió otra: el coronavirus. «Como no se pueden hacer asambleas, tenemos con los vecinos reuniones cuatro veces por semana, en tandas de seis, en nuestras oficinas de Primero de Mayo», comenta el promotor, que añade que el martes está previsto que vaya «un grupo grande, a distancia de dos metros, con mascarilla», como mandan las medidas para tratar de no propagar más el virus.

Presentación de la maqueta a los vecinos en el año 2006. J. Clares

López Rejas deja claro que, en el transcurso de estas obras, no se va a desalojar a nadie y no habrá vecino que se quede sin un techo mientras se acometen las reformas. Comenta que primero se prevé levantar dos torres, de 27 plantas, en el solar de la escuela infantil, y que en edificarlas se tardará unos 24 meses. Una vez finiquitado esto, prosigue el promotor, «las once primeras plantas de las torres se usarán a modo de vivienda de transición para los propietarios, que entrarán a residir ahí cuando se tiren sus viviendas, que serán mejoradas, se harán nuevas, y entonces ellos saldrán de la vivienda provisional de la torre y volverán a sus casas».

Los pisos de las torres, cuando dejen de ser domicilios de transición, «se venden a otras personas». «Una vez que los dejemos de necesitar, pasará como con los pisos que se hicieron en las Olimpiadas de Barcelona» para alojar temporalmente a deportistas.

Se crearán 10.000 empleos

«Hay mucha gente apuntada para comprar los pisos nuevos», manifiesta, y recuerda que «ahora es más barato comprar», ya que se hace sobre plano. López Rejas calcula que ya hay unos 400 interesados en vivir en lo que será «el centro de Murcia» cuando se someta al barrio a una rehabilitación integral. Rehabilitación que costará 417 millones de euros y que supondrá la creación de alrededor de 10.000 empleos.

«Además de 14 millones de euros de ingresos a las arcas municipales solo de licencia de obras», puntualiza el empresario, que valora la «extraordinaria relación con los vecinos», de quienes ha sentido su «apoyo absoluto» desde el principio del proyecto. También comentó que es «un lujo trabajar con Ricardo Bofill», arquitecto que ya en 2007 presentaba el plan a los residentes en La Paz.

Explica José López Rejas que, para que concluya del todo el proyecto de rehabilitación de La Paz, harán falta «otros diez años».

Aunque mañana comenzarán a trabajar las máquinas, el proyecto no tiene todavía licencia de obra, admite. «Depende un poco de la covid, porque ahora no se puede hacer una asamblea en la que ver el reparto de pisos», argumenta. No obstante, «la licencia de obra es un tema arreglado, es cuestión de que, una vez se presenta el proyecto, el funcionario de cada sección firme, no es algo que vaya a Pleno», hace hincapié.