El pleno del Ayuntamiento de Murcia ha aprobado este viernes una modificación del presupuesto de 2020 para sumar a las ayudas de emergencia social una partida de un millón de euros procedentes de remanentes de tesorería, medida criticada por la oposición por aprobarse apenas una semana después de la entrada en vigor de las cuentas públicas.

Según ha explicado en su intervención el concejal de Hacienda, Eduardo Martínez-Oliva, este suplemento de crédito procede de partidas que no se van a ejecutar en lo que queda de año y que, por tanto, la ley permite que sean reorientadas a otras necesidades que sí puedan llevarse a cabo.

Dado el escaso tiempo que resta para que acabe el año, este millón de euros adicional se pondrá a disposición de inmediato a entidades del tercer sector para complementar las actuaciones de emergencia social que están llevando a cabo con las familias más vulnerables del municipio.

El número de beneficiarios de ese tipo de ayudas, ha recordado, ha aumentado de manera exponencial desde que comenzó la pandemia del coronavirus.

El primer teniente de alcalde, Mario Gómez, de Ciudadanos, ha recordado que este tipo de suplementos de crédito se debe hacer todos los ejercicios al final del año, independientemente de cuándo se hayan aprobado las cuentas, porque es el momento en que la ley permite redistribuir partidas que no han llegado a gastarse.

De esa manera, ha destacado, se garantiza que no se pierdan fondos que no se iban a poder usar empleándolos en cuestiones “más útiles”, la principal en la actual situación de pandemia, la de apoyar a las familias vulnerables.

La concejala socialista Carmen Fructuoso, en cambio, se ha mostrado muy crítica con la gestión que se ha hecho de los presupuestos y el retraso en su aprobación a pesar de que el Gobierno local de coalición tiene mayoría absoluta y ha recalcado que “su nefasta gestión” ha provocado no solo esta modificación presupuestaria, sino que en la Concejalía de Políticas Sociales haya más de 4,8 millones de euros “acumulados en expedientes de ayudas” que no se han ejecutado”.

También ha lamentado que se pongan los fondos en manos de entidades sociales a las que se está derivando todo el trabajo que deberían hacer los servicios sociales municipales, como si de una externalización de los mismos se tratara, por lo que el partido se ha abstenido en la votación.

De esa externalización a través de las ONG ha hablado también el portavoz municipal de Podemos, Ginés Ruiz, que sin embargo ha votado a favor de la propuesta porque, ha señalado, este tipo de suplementos de crédito están contemplados en la ley con una tramitación como la que se ha llevado a cabo.

“Apoyamos el suplemento de crédito porque sería inasumible gestionar esos fondos de otra manera” a estas alturas del año, ha dicho, pero ha insistido en la necesidad de reforzar los servicios sociales municipales para que sean ellos y no el tercer sector los que guíen esas políticas.

También Vox ha votado a favor porque, ha explicado su portavoz, José Ángel Antelo, la situación de emergencia social del municipio “es dantesca” y requiere de estos fondos, pero ha criticado duramente la “falta de previsión y planificación” de los presupuestos municipales.

En su opinión, habría sido posible además recabar más remanentes para estos fines sociales y este pleno no debería haberse celebrado si la gestión municipal fuera la correcta.

En la sesión, de carácter extraordinario, se ha aprobado también con los votos a favor de PP y Cs, la abstención de PSOE y Podemos y el voto en contra de Vox una baja de crédito con anulación del presupuesto por valor de 3,1 millones de euros.

Esa cantidad, según el informe de la intervención municipal, es el déficit que se contabilizó en la liquidación del presupuesto de 2019 y la ley obliga a nivelar esos remanentes de tesorería negativos en las cuentas del siguiente ejercicio minorando gastos de otras partidas.

El punto se ha aprobado sin debate, ya que el alcalde, José Ballesta, ha decidido acelerar el transcurso del pleno al conocer la noticia del fallecimiento del ex concejal socialista Sebastián Peñaranda en condiciones que aún se desconocen.

El primer edil ha mostrado su intención de suspender la sesión, si bien el grupo socialista le ha instado a finalizarla, lo que se ha hecho procediendo a la votación de los puntos pendientes, sobre facturas de contratos, sin la intervención de ninguno de los concejales.