Más de un 75% de las empresas de la Región de Murcia redujo su facturación durante el estado de alarma y más de un 68% muestra su pesimismo de cara al futuro económico inmediato. Así lo recogen los informes preliminares del 'Análisis regionalizado del impacto de la COVID-19 en España. Perspectivas económicas y empresariales', un barómetro incluido en el Plan Propio de Investigación de la UCAM y que se suma a otros 23 proyectos de distintas áreas de conocimiento que tienen como objetivo solucionar o mitigar los problemas sanitarios, económicos y socioculturales ocasionados por la actual pandemia.

El barómetro, realizado por el Grupo de Investigación de Economía, Gestión Pública y Tercer Sector de la UCAM, en colaboración con el Servicio de Información y Orientación Laboral (SOIL), ha contado con la participación de unas 80 empresas de la Región.

Aumento de la morosidad

Según refleja el estudio, de marzo a junio las empresas vieron cómo se incrementaban los periodos de cobro (65% de los encuestados) y aumentaba la morosidad (54%). Además, dos de cada tres de los empresarios preguntados confirman que, dada la situación, se vieron obligados a cancelar las inversiones previstas para ese periodo.

Entre las medidas aplicadas durante el confinamiento, los encuestados vieron positivas la aplicación de los ERTE, la flexibilidad horaria y el teletrabajo. En cambio, consideran menos eficaces el aplazamiento de impuestos o la moratoria de créditos al no ayudar a solucionar el problema real ante la continuidad de la crisis.

De cara a los próximos meses, el sector empresarial murciano no se muestra optimista y sitúa a España a la cola de Europa en sus perspectivas para mejorar los indicadores actuales, siendo críticos con la gestión de la Administración, en especial la central. El 60% de los encuestados cree que su empresa estará igual o peor que ahora. Para ayudar a reactivar la economía ven necesarias dos medidas: el mantenimiento de los ERTE y sobre todo la reducción de la carga impositiva actual, algo que solicitan tres de cada cuatro empresas.