Diferentes rankings avalan la calidad de la enseñanza de la Universidad Católica de Murcia gracias a su modelo, que queda garantizado en el protocolo de presencialidad adaptada que ha elaborado la institución, y que da respuesta a los distintos escenarios que puedan producirse por la evolución de la crisis sanitaria. El mismo recoge los criterios técnicos y normativos trasladados por las autoridades sanitarias y académicas.

Recuperar la asistencia

Este documento técnico, que es de aplicación a todas las titulaciones de grado y máster, prevé los distintos escenarios, que van desde la recuperación plena de la presencialidad para impartir las clases con normalidad, a la aplicación de un sistema bimodal que combina las metodologías virtuales y presenciales en grupos reducidos y, en el peor de los casos, a la implementación de un escenario de no presencialidad como el llevado a cabo en el segundo semestre del curso 2019/2020, que funcionó con todas las garantías, habiéndose ampliado y mejorado además recientemente todas las herramientas virtuales.

Incorporación gradual

La vuelta a clase será gradual por cursos y titulaciones, siguiendo así el calendario de acceso programado por el Vicerrectorado de Calidad y Ordenación Académica. En el escenario previsto para el inicio de las clases, en el próximo mes de septiembre, el profesorado impartirá la docencia en el aula, debiendo asistir a los campus con mascarillas tanto los estudiantes como todo el personal de la Universidad.

Aulas virtuales

La UCAM ha instalado cámaras en todas sus aulas para que los estudiantes que no puedan asistir al campus sigan las clases en tiempo real. Se trata de webcams con micrófono integrado, con sonido estéreo, lente de cristal full hd y resolución de 15 megapíxeles. Este equipamiento del que se ha dotado a los campus de Murcia y Cartagena permitirá la emisión en directo de las clases a través de la herramienta 'Campus Virtual'.

De este modo, el profesor estará siempre en contacto con todos los alumnos, tanto con los que estén en el aula como con aquellos que no hayan podido asistir, pudiendo, en todos los casos, comprobar la asistencia, aclarar dudas e interactuar con ellos.

Los estudiantes de otros países que pudieran verse afectados por la diferencia horaria tendrán acceso a las clases grabadas y asegurada la comunicación con el profesor.