La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Murcia acoge este jueves el juicio por el despido de los 14 trabajadores del Hotel Arco de San Juan de Murcia, que cerró sus puertas el pasado 2 de marzo después de treinta años de servicio ininterrumpido.

La vista prevista para hoy se corresponde con la denuncia del expediente colectivo de los representantes legales de los trabajadores contra la empresa Inmuebles Turísticos y dos sociedades más de los Marqueses de Mondéjar, propietarios del edificio, una demanda en la que los empleados reclaman la nulidad de los despidos o que sean declarados improcedentes, tal y como explica a LA OPINIÓN el abogado de los trabajadores, Joaquín Dólera.

Los propietarios llevaban varios años tratando de encontrar comprador, pero nadie ha aceptado el precio que pedían, por lo que decidieron echar el cierre para poner a la venta el hotel ya sin personal. El inmueble está calificado por el Ayuntamiento de Murcia como residencial y hotelero, por lo que no se descarta que pudiera ser remodelado para albergar apartamentos turísticos. El edificio está valorado en unos once millones de euros.

Dólera afirma que «las tres empresas forman un entramado societario, ya que hay relaciones económicas entre ellas y en muchos casos reproducen hasta los mismos accionistas, y nos ponen como pantalla a la menos solvente, Inmuebles Turísticos, una sociedad que ha sido descapitalizada».

La nulidad de los despidos obligaría a readmitir a los trabajadores, aunque como el hotel se encuentra cerrado otra opción sería el abono de indemnizaciones de 45 días por año trabajado hasta 2012 y de 33 días por año desde esa fecha a la actualidad. El abogado de los denunciantes recuerda que algunos de ellos tienen una antigüedad de 20 años.