Un sargento de la Brigada Paracaidista (BRIPAC) de la pedanía murciana de Javalí Nuevo, que colaboraba en el dispositivo implantado para vigilar que se cumplía el confinamiento impuesto por el estado de alarma, retuvo a un hombre que, presuntamente, maltrataba en plena calle a su expareja hasta la llegada de policías locales del ayuntamiento de Murcia.

Este suboficial declaró a la Policía, según ha sabido Efe, que los hechos se produjeron en la calle Frenería de Murcia y que la bofetada que presuntamente dio el detenido a la denunciante fue de tal intensidad que pese a que estaba a cincuenta metros de distancia, lo escuchó perfectamente.

El detenido, que fue puesto en libertad con cargos por el juzgado de guardia, con una orden de alejamiento de 500 metros de aquella, es R.F., un hombre de 40 años nacido en un país magrebí.

La víctima de los hechos, natural de un país del Este de Europa, aseguró a los agentes, que comprobaron el enrojecimiento que presentaba en la cara como consecuencia, supuestamente, de la agresión sufrida, que mantuvo una relación sentimental con el detenido, finalizada hacía tres meses.

Y añadió que este no acepta que haya iniciado una relación con otro hombre y que ese fue el motivo de la agresión.

Ahora, R.F. se enfrenta a estas diligencias penales y, también, a la multa que podría serle impuesta por incumplir el confinamiento derivado de la lucha contra la covid-19.