La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la sentencia de un Juzgado de lo Penal de esta ciudad que condenó a un hombre a un año de prisión por quebrantar una orden de alejamiento en cumplimiento de la cual no podía acercarse a menos de 300 metros del lugar donde se encontrara su madre.
El Juzgado, en la sentencia ahora confirmada por la Audiencia, declaró probado que el acusado fue condenado por un delito de malos tratos en el ámbito familiar, entre otras, a la pena de alejamiento de su progenitora por un tiempo que se prolongaría hasta mediados de diciembre de este año.
Sin embargo, el 21 de diciembre de 2018 se acercó a la casa de su madre, y aunque esta no le abrió la puerta, sí escuchó cómo decía que tenía que pegar fuego a la vivienda.
El Juzgado lo condenó a la pena citada como autor de un delito de quebrantamiento de condena, al tiempo que lo absolvía de un delito de amenazas graves.
En su recurso, el acusado alegó que la sentencia apelada incurría en un error a la hora de valorar las pruebas, además de negar los hechos.
La Audiencia Provincial, al desestimar el recurso indica que el testimonio incriminatorio de la madre es suficiente para condenar, al ser persistente y verosímil, además de indicar que son múltiples las denuncias presentadas por aquella contra el acusado por hechos similares.
Comenta la sala que la denunciante, que acudió a Comisaría apenas hora y media de recibir la visita del hijo, no actuó por móviles espurios.
Finalmente, dice el tribunal que el día de los hechos él se encontraba ingresado en un hospital de Murcia, circunstancia que, añade, no ha probado.
