La situación extrema que vivió ayer Murcia con una alerta roja por gota fría que abarcaba todo el territorio de la Región obligó a última hora de la noche a evacuar de emergencia a los vecinos de las zonas más cercanas al río en las pedanías de Alquerías, El Raal, Zeneta y Santa Cruz. Estos ciudadanos fueron llevados hasta los pabellones deportivos habilitados por el Ayuntamiento de Murcia.

El alcalde de Murcia, José Ballesta, reconoció tras la última reunión del Comité de Crisis que algunas zonas del municipio se han visto muy castigadas por la tormenta de ayer, ya que en algunos puntos se llegaron a registrar más de 100 litros por metro cuadrado en un periodo de 24 horas. Las zonas más afectadas fueron las limítrofes con Beniel y Santomera, como El Raal, Llano de Brujas, Zeneta y Alquerías, así como la Zona Norte de la ciudad, con hasta 90 litros por metros cuadrado en Nueva Condomina, Thader o Espinardo.

Ante la previsión de que cayeran hasta 90 litros por metro cuadrado durante la noche y hasta las 3.00 de la madrugada, cantidad que venía a unirse al agua que había descargado la DANA durante todo el día, las autoridades tomaron la decisión de evacuar a los vecinos de las zonas con mayor riesgo.

El primer edil dijo, acompañado por los portavoces del resto de grupos municipales del Consistorio, que entre las medidas más importantes que se habían tomado estaba el habilitar los pabellones Cagigal y del Esparragal para acoger a las personas que se evacuaran de las pedanías murcianas de El Raal, Alquerías, Zeneta y Santa Cruz.

La situación anoche era de preaviso ante la crecida del río Segura a su paso por Murcia, a lo que se unían las continuas lluvias que registraba la predicción de la Aemet. A esto se sumaban las medidas que se habían tomado durante el día de ayer para soltar caudal aguas arriba, por lo que estaba previsto que este aumento del caudal se fuera notando en la ciudad de Murcia pasadas las diez de la noche. Una situación que incrementó el riesgo en la zona final del río, a su salida del municipio, precisamente donde se estrecha el cauce.

Colaboración de los pedáneos

La CHS y el Gobierno regional fueron los que dieron aviso al Ayuntamiento en la tarde-noche de ayer para evacuar a los habitantes de las viviendas que se encuentran cerca del río a su salida del municipio de Murcia en dirección a Beniel y Santomera. Este desalojo se llevó a cabo con la colaboración de los pedáneos con el objetivo de que se llevara a cabo de la forma más rápida y segura posible. El alcalde de Murcia explicó que «en un primer momento se les ha recomendado a los vecinos afectados que se fueran a casas de familiares o segundas residencias, pero si no cuentan con esta opción se ha habilitado el pabellón del Esparragal, que es el más cercano a esta zona». Allí los Servicios Sociales han puesto un punto de información y de registro para que todos los familiares sepan en todo momento en qué situación se encuentran las personas acogidas.

Ballesta insiste en que los Servicios Sociales «están volcados para atender a las personas afectadas» por esta situación de emergencia que se ha convertido en prioritaria, por lo que se han suspendido los actos de la Feria, se han cancelado los eventos deportivos y cerrado los centros juveniles.

Desde el Ayuntamiento de Murcia destacan el trabajo que están haciendo los 1.249 operarios y trabajadores de los distintos cuerpos y servicios que forman el dispositivo especial que trabajará a lo largo de toda la noche, entre Bomberos de Murcia, Policía Local, Protección Civil, Aguas de Murcia, el servicio de alumbrado, limpieza, urbanismo, el Servicio de Emergencia Móvil y Atención Social (Semas), así como parques y jardines. Muchos de ellos se han incorporado voluntariamente al dispositivo.

Es previsible que la situación se complique, principalmente en el tramo de salida del río del municipio de Murcia y su entrada a Beniel, ya que «es el que entraña un mayor peligro», por lo que «estamos en permanente contacto por si debemos reunirnos los miembros del Gabinete de Crisis», dijo el alcalde. Está previsto que la alerta roja pase a ser naranja entre las 6.00 de la mañana y las 12 del mediodía, cuando pasará a ser amarilla hasta las 12 de la noche.