Los agentes de la Policía Local de Murcia ejercen de ángeles, no solo para los seres humanos. Cuando un animal está en apuros, también van al rescate. Es lo que ha pasado en Beniaján.

Agentes del cuartel de esta localidad recogían anoche a una camada de perros. Algún desaprensivo tuvo el valor de abandonar a estos indefensos cachorros sin agua ni comida. Sin duda "alguien sin piedad", tienen claro desde el Cuerpo.

Unos jóvenes los vieron y avisaron a los agentes, que se hicieron cargo. La Policía también califica de ángeles a estas personas que dieron la voz de alarma.

Ahora los perritos, blancos y negros, buscan casa. Quien quiera ofrecerles un hogar, puede ir a preguntar por ellos. Estan en dependencias de Zoonosis para desparasitarlos, vacunarlos y poderlos darlos en adopción, indica el Cuerpo.

Actualmente, el Código Penal establece que, quien maltrate a un animal que esté domesticado o amansado, puede ser condenado como máximo a 18 meses de cárcel.