La gran competencia de la producción artesana de los confiteros murcianos está en los grandes almacenes que ofrecen este dulce típico navideño realizado en cadena y en grandes cantidades a un precio, generalmente, menor. Los confiteros recomiendan a los consumidores «que tengan mucho cuidado y miren con detenimiento lo que están comprando, sin dejarse llevar por el dinero». Y es que, «el precio es engañoso porque quienes mejor tratan este producto son las pastelerías artesanas», ya que «se le dedica el día exclusivamente al roscón, por lo que son productos realizados a diario», al contrario que los supermercados, «que pueden tenerlos durante meses en congeladores».