La Guardia Civil de la Región de Murcia ha detenido al conductor de un vehículo articulado de catorce toneladas, por circular por la autovía A-30 superando cinco veces la tasa máxima de alcohol permitida, una situación que generó un grave riesgo para la vida e integridad física de los usuarios de la carretera.
La actuación se ha llevado a cabo durante el desarrollo de la campaña del Plan de Inspección del Transporte Terrestre, que se ha efectuado por efectivos del Sector/Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Murcia, junto con funcionarios del Servicio de Inspección de la Dirección General de Transportes, Costas y Puertos de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (CARM).
Los hechos tuvieron lugar durante la mañana del pasado 25 de octubre, a la altura del kilómetro 155 de la autovía A-30, que une Albacete y Cartagena, en un área de servicio del puerto de la Cadena, término municipal de Murcia, cuando durante el transcurso de un servicio de inspección, enmarcado en la Campaña de Pesajes de Camiones que se desarrollaba entre los días 23 y 25 de este mes, ambos inclusive, se detuvo a un camión para someterlo a control.
Los guardias civiles apreciaron que el camionero aparentaba indiciariamente no encontrarse en las condiciones adecuadas para conducir, posiblemente a consecuencia de la ingesta de algún tipo de sustancias incompatibles con la conducción, según informan fuentes de la Guardia Civil.
Por este motivo, el conductor -varón, español, de 41 años y vecino de Murcia- fue sometido a las preceptivas pruebas de alcoholemia en las que arrojó un resultado positivo de 0,74 y 0,72 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, en sendas pruebas reglamentarias que se le practicaron, quintuplicando prácticamente la tasa máxima permitida, que en el caso de conductores profesionales es de 0,15 mg/litro.
Ante estas circunstancias, el camionero, que se desplazaba desde Murcia hasta La Unión con un cargamento de diversos productos para su distribución a supermercados, fue detenido como presunto autor de delito de conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, al superar con creces las tasas establecidas, siendo puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 6 de Murcia, para la celebración del correspondiente juicio rápido.
Dada la elevada tasa de alcoholemia, el vehículo quedó inmovilizado en el área de servicio, debido a la peligrosidad que comporta la circulación de un vehículo de gran tonelaje en estas condiciones y la merma de reflejos que la influencia de alcohol supone, hasta que, esa misma mañana, la empresa desplazó al lugar a otro conductor habilitado que pudo retirar el vehículo para continuar el viaje proyectado.
