La Audiencia Provincial de Murcia ha confirmado la sentencia que condenó a una mujer a 60 días de trabajos comunitarios por golpear a su hija de 10 años con un cinturón y causarle lesiones que tardaron siete días en curar.

La sentencia señala que el derecho de corrección del progenitor sobre los hijos alegado por la madre para pedir su absolución no puede justificar comportamientos como este, constitutivos de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.

El pasado febrero, un juzgado de lo penal de Murcia le impuso además una orden de alejamiento de la niña durante dos meses y una indemnización de 210 euros por las lesiones que le produjo en una visita del régimen establecido tras la separación matrimonial.

"Después de reñirle porque no hacía caso a sus indicaciones, cogió un cinturón, la golpeó en el brazo y le causó un hematoma que requirió asistencia facultativa", lo que dio origen a la denuncia del padre.

En su recurso, la madre alegó que el Juzgado había errado al valorar las pruebas y se había vulnerado su derecho a la presunción de inocencia y de corrección de los padres sobre los hijos.

Expuso igualmente que la niña pudo estar influenciada por el padre y que mientras que este dijo que la lesión la había sufrido en un brazo, la pequeña afirmó que fue en el otro.

Para la sala, esa contradicción no tiene importancia, ya que el parte médico y la versión del padre coinciden, por lo que la menor pudo equivocarse de brazo cuando declaró.

Y añade que "se trata de una acción violenta e intensa infligida a la menor con un cinturón, elemento que puede provocar mayor resultado lesivo en el caso de ser utilizado para golpear que si se hubiese empleado la mano".

Comenta que "el derecho de corrección no puede justificar que una madre golpee a su hija de diez años con un cinturón con tal intensidad que deje en su brazo un moratón doloroso a la palpación, como hizo constar en su informe el médico de urgencias que la atendió".