La desigualdad socioeconómica y los factores ambientales tienen un efecto directo en la altura de las personas, de forma que, a más pobreza, menos se desarrollan los niños durante su etapa de crecimiento. Esta es la principal conclusión de una investigación liderada por la Universidad de Murcia (UMU), en los que participan 13 investigadores de diez universidades españolas, y que han sido publicados en un número especial de la revista Nutrición Hospitalaria.

Un total de 19 análisis abordan las distintas facetas de la desigualdad de la salud nutricional y sus condicionantes desde finales del siglo XVIII hasta 2015. Los resultados muestran cómo durante décadas la talla ha sido mayor en las comunidades desarrolladas económicamente, como el País Vasco y Cataluña, con hasta dos y tres centímetros más. Así, el profesor de Economía Aplicada de la UMU e investigador principal del estudio, José Miguel Martínez Carrión, revela que actualmente se han reducido las diferencias entre regiones.

En contraposición, en las poblaciones pequeñas las desigualdades entre barrios pobres o ricos siguen estando presentes, así como las diferencias entre las zonas rurales y las urbanas. El examen constata cómo la altura perpetúa el estancamiento del desarrollo de las sociedades, ya que una baja estatura está asociada en muchos puestos de trabajo a una baja productividad.

De este modo, el nivel de alfabetización o el peso al nacer son otras variables estudiadas que abren caminos para ahondar en los efectos de la desigualdad social en la estatura. También se considera el papel del clima y medio ambiente. El caso de Canarias es significativo: con una economía más estancada, la altura de sus habitantes es similar a la de las más ricas. «Esto nos da pie a profundizar en el papel del clima y los efectos que el cambio climático en este aspecto», indica Carrión. De este modo, conocer la dimensión de la malnutrición y el retraso en el crecimiento en el pasado, así como los contextos que impulsaron el incremento de la altura en el último siglo, proporciona un «valioso» conocimiento para entender los problemas actuales e intervenir en las políticas futuras sobre la infancia y la adolescencia.

La evolución en España

Los científicos han concluido que, tras los efectos que dejó la Guerra Civil y la pobreza, España tuvo el mayor incremento de altura de toda Europa en la segunda mitad del siglo XX.

De este modo, los datos históricos ilustran cómo antes del inicio de la guerra los ricos eran tres centímetros más altos que los pobres; unas diferencias que aumentaron durante la contienda y especialmente durante la posguerra.