Las concejalas de Derechos Sociales y Cooperación al Desarrollo, Conchita Ruiz, y de Tráfico, Seguridad y Protección Ciudadana, Lola Sánchez, junto con la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Violante Tomás, presentaron ayer la prórroga del convenio de colaboración para continuar ofreciendo el servicio de protección y asistencia integral a víctimas de violencia de género del municipio, a través de la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil.
La Unidad de Atención Psicosocial en Emergencias ha sido activada desde 2016 hasta hoy en 477 ocasiones, de las cuales unas 125 han sido por violencia de género. El dispositivo, integrado por 28 voluntarios, tanto psicólogos como trabajadores sociales, actúa los fines de semana, con guardias de 24 horas, completando así la atención ordinaria que la Comunidad Autónoma ofrece a las víctimas de violencia de género.
Una vez derivados desde el Dispositivo de Atención Telefónica Urgente para Mujeres Maltratadas, los voluntarios de protección civil, con formación en emergencias e intervención en crisis, ofrecen asistencia y atención psicológica, integral e inmediata a mujeres víctimas de violencia de género y sus hijos. Además, se trasladan al domicilio de la víctima o al lugar donde ella estime oportuno, para realizar de manera efectiva la tarea de acompañamiento en las intervenciones que sean precisas.
Asistencia voluntaria
Con este acuerdo, el Ayuntamiento «aporta sus medios disponibles para reforzar la protección y asistencia integral a víctimas de violencia de género» del municipio y, en este caso, «con un aspecto que no se debe olvidar», y es que la Agrupación de Voluntarios de Protección Civil está formada por 100 miembros, que a lo largo del año ejecutan en torno a 600 intervenciones entre actuaciones preventivas, emergencias y asistencias, según fuentes municipales.
De estas, la Unidad Psicosocial en Emergencias tiene su principal función en prestar apoyo a las víctimas y familiares sobre todo por crisis de ansiedad, accidentes de tráfico y comunicación de malas noticias. En 2016 trabajaron durante 4 días con las familias afectadas por las inundaciones de Los Alcázares o en el accidente de tráfico en el que perdieron la vida 5 jóvenes en Torre Pacheco.
