Otro de los nuevos espacios de los que dispone Mercamurcia es un aula de formación, ubicada en la antigua sala de subasta de flores que dejó de utilizarse en el año 2004, fecha en la que cayó tanto la producción que se quedó sólo como un mercado en origen. Este es el motivo por el que las mesas cuentan con unos pulsadores que eran utilizados hace años para hacer las pujas y para que los usuarios marcaran su número de cliente. Esta aula permitirá impulsar Mecamurcia como centro de formación específico.