No todos los productos y enseres que tenemos en nuestras casas pueden acabar sus días en un contenedor o en los puntos habituales de reciclaje. Ya sea por sus dimensiones, volumen o características, algunos no se pueden depositar en los contenedores 'normales', los verdes de residuos orgánicos o los de reciclaje de papel, plástico o vidrio, por lo que el Ayuntamiento de Murcia puso en marcha hace más de una década un servicio de ecopuntos móviles y un ecoparque, ubicado en el Polígono Industrial Oeste, con el fin de que los ciudadanos puedan depositar los objetos que requieren un tratamiento especial, una vez terminada su vida útil.
Esta instalación «no es un vertedero ni un almacén», apuntaba ayer la concejala de Infraestructuras, Obras y Servicios Públicos, Rebeca Pérez, ya que lo que se hace en el ecoparque es «recepcionar todos los residuos, eliminando las partes tóxicas y clasificando los objetos y enseres que llegan para que, después, puedan ser reutilizados, reciclados o valorizados correctamente», y siempre poniendo especial atención sobre el cuidado del medio ambiente.
El servicio lleva en funcionamiento desde el año 2003. Quince años en los que se ha ido incrementando el uso de este servicio y en los que se ha puesto a disposición de los ciudadanos seis ecopuntos móviles que recorren el caso urbano y todas las pedanías de Murcia.
Los mayores crecimientos se han registrado en los tóner, que han aumentado en un 75%, seguidos de los teléfonos móviles (48%), ropa y aceites (30%), mientras se ha producido un descenso en la recogida de radiografías. Aunque este dato no es algo negativo, ya que «esto se debe a que los centros médicos están sustituyendo estas pruebas por formato digital, por lo que se usan cada vez menos», algo que también pasa con los tubos fluorescentes, que al estar siendo reemplazados por la tecnología LED y, por tanto, llegan en menor cantidad a estos puntos de tratamiento de residuos singulares.
Cifras de récord
En el último año, Murcia ha batido récords. Así, este servicio recepcionó 50.000 kilos de monitores, que equivalen a 10.155 unidades, casi 5.000 teléfonos móviles y 13.500 kilos de ropa. Entre las prendas recibidas, destacan los 38.500 vaqueros que los murcianos depositaron en este servicio.
También los ecopuntos han alcanzado sus mejores cifras en recogida de residuos. En los ecopuntos, se han recogido 441.888 kilos, lo que supone un incremento del 28% con respecto al año 2015, cuando se registraron 345.000 kilos. «Es el momento de felicitar a los murcianos y agradecerles su compromiso, dedicación y esfuerzo», apuntaba la edil de Infraestructuras, Obras y Servicios Públicos. En el primer semestre del año, se han reciclado dos millones de kilos de residuos más que en el mismo periodo de 2017, algo que «nos alienta a seguir trabajando en la misma dirección», con iniciativas como las campañas de sensibilización y educación que se llevan a cabo en los centros educativos y en el centro de tratamientos de residuos de Cañada Hermosa. Y es que, «estamos en el top, nunca antes en la historia de este municipio se han alcanzado unos índices de reciclaje tan altos».
La edil también hizo hincapié en aquellos productos y residuos que no deben llevar a los ecopuntos o el ecoparque. Son, entre otros, las basuras domésticas, los residuos industriales, mineros o radioactivos, así como los clínicos (como jeringuillas o medicamentos), que requieren un tratamiento específico.
Como curiosidad, los vecinos de los barrios de San Pedro y Santa Catalina han destacado como los que más usan estos vehículos para depositar sus residuos, con una media de 1.332 y 1.165 visitas por cada mil habitantes, respectivamente.
