Mandos policiales de la Región han aconsejado que no se retire la vigilancia de las vías por las que entra el ferrocarril en la estación del Carmen, sobre todo en la zona de Santiago el Mayor, como había prometido que haría el futuro delegado del Gobierno en la Región, el socialista Diego Conesa. Según ha podido saber esta Redacción, estos responsables policiales temen que el fin de la presencia de agentes pueda tener como consecuencia que se repitan los incidentes que tuvieron lugar en otoño, cuando radicales llevaron a cabo ataques violentos contra los trabajos que se realizan para el soterramiento de las vías actuales y para la llegada de la Alta Velocidad a la capital regional.

Según estas fuentes, no teme la Policía a la Plataforma Pro Soterramiento, que lleva más de 30 años reivindicando de forma pacífica que las vías que separan Santiago el Mayor del resto de la ciudad estén bajo tierra. Estos llevan más de 200 días manifestándose de forma pacífica contra la llegada del AVE en superficie, aunque sea de manera provisional hasta que se realicen las obras del soterramiento, contra el muro de protección que se construye en la zona y contra la pasarela peatonal habilitada para el paso entre una zona y otra de las vías como consecuencia de la supresión del paso a nivel de Santiago el Mayor. El miedo de los responsables de seguridad está en otro grupo de tendencia más radical, en el que hay personas de perfil más violento, que se ha adherido a las protestas por el soterramiento y a las que responsabiliza de los incidentes que ocurrieron en octubre, que tuvieron cortado durante unos días el tráfico ferroviario.

La información que tiene la Policía es que, desde el cambio de Gobierno producido por la moción de censura de Pedro Sánchez contra Mariano Rajoy, se ha producido un estado de «euforia» entre los miembros de este grupo, interceptándose en las redes sociales mensajes preocupantes que dan a entender que, aprovechando la retirada policial avanzada por Diego Conesa, se puedan volver a producir incidentes.

No obstante, pese a las peticiones de los mandos policiales, la presencia de los agentes en las vías es una decisión política, en manos del delegado del Gobierno, que es quien manda en las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en la Región de Murcia. «Vamos a retirar esa imagen obscena, en este caso de policías nacionales tratando a los vecinos como si fueran delincuentes», afirmó Diego Conesa a los pocos días de tomar posesión Pedro Sánchez como nuevo presidente del Gobierno.