Conocer cuándo debe estar encendida la luz o el ordenador, cuándo cerrar el grifo del baño o cómo se mide el consumo en el contador. Estas son algunas de las áreas que han estado trabajando los más de 3.000 alumnos de diez colegios que han participado en el proyecto 'Mi cole ahorra con energía' y gracias al cual han logrado reducir en dos toneladas las emisiones de CO2 a la atmósfera.
El concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Agua, Antonio Navarro Corchón, ha presentado esta mañana el balance del primer trimestre de 2018 junto al presidente de la Fundación Desarrollo Sostenible, Emilio Ballester, y ha anunciado que a los diez centros que han desarrollado este año esta iniciativa pionera se sumarán diez más el próximo curso, ya que es una forma de concienciar a los más jóvenes y trabajar la sensibilización ambiental, al tiempo que se reduce la factura eléctrica.
Concretamente, de enero a marzo los colegios Santa Rosa de Lima, Saavedra Fajardo, La Arboleja, Mariano Aroca, Infanta Cristina, Pérez Urruti, El Molinico, Los Rosales y Santo Ángel han logrado reducir su consumo eléctrico en 7.098 kilovatios, lo que ha supuesto una reducción de dos toneladas de CO2 a la atmósfera y un ahorro económico cercano a los 2.000 euros.
A la cabeza del ahorro se sitúan los centros Santa Rosa de Lima y Los Rosales, que han logrado que el consumo energético baje en más de un 10 por ciento, un ahorro que podrán reinvertir en el propio colegio para la compra de material educativo o en actividades de formación.
Ballester ha subrayado que una de las mayores ventajas del trabajo que se ha desarrollado con los escolares es que "estas acciones que se aprenden en la escuela se trasladan también a las casas".
Carmen Serrano, del colegio Santa Rosa de Lima, dice que entre las actividades que están desarrollando está el colocar etiquetas en las llaves de la luz para recordar a los niños la importancia de apagarlas cuando no es necesaria tenerla encendida. Mientras que Fernando Gómez, del colegio Los Rosales, reconoce que la plataforma con la que han trabajado les ha facilitado mucho la tarea, "permitiendo acercar a los alumnos algunos conceptos que pueden llegar a parecer complejos para sus edades".
El concejal ha informado que el objetivo es que la iniciativa se vaya implantando de forma paulatina en todos los colegios del municipio, una acción con la que se podría lograr un ahorro eléctrico de 386.318 kilovatios al año, dejando de emitir a la atmósfera 104 toneladas de CO2 al año y reduciendo gastos de electricidad de hasta 107.628 euros. La Concejalía de Medio Ambiente también está desarrollando acciones para reducir el consumo en los edificios municipales y las emisiones provocadas por el tráfico.
