La nueva Ley de Contratos está pasando factura a la Policía Local de Murcia, que está sufriendo la falta de medios y herramientas de trabajo debido a las complicaciones burocráticas que supone la nueva norma para la adquisición de cualquier material o justificar cualquier gasto. A los problemas, desvelados ayer por LA OPINIÓN, con las decenas de vehículos que permanecen en el parque móvil del Ayuntamiento a la espera de ser reparados para prestar servicio al no llegar las piezas que necesitan, se suman ahora los inconvenientes que se encuentran los agentes para poder hacer uso de los alcoholímetros al no disponer, ni tan siquiera, de pilas para que estos funcionen. Así lo indicó ayer el concejal del Grupo Municipal Socialista en la Glorieta Juan Vicente Larrosa, quien alerta de la «pobreza de medios de la Policía Local de Murcia, que no tiene ni para renovar las pilas de los alcoholímetros». Esta denuncia del PSOE es respaldada desde el Sindicato de Policía Local de la Región de Murcia (SPLRM), cuyos representantes confirmaron ayer a esta Redacción que «en muchos casos no podemos hacer uso de los alcoholímetros al no disponer de pilas, sólo nos falta tener que ir nosotros al chino para comprarlas», a la vez que indicaron que «hasta se nos ha prohibido llevar los coches al lavadero, no podemos realizar ningún gasto».

El concejal socialista ha añadido que «no es justificable de ninguna de las maneras que una plantilla que trabaja en algo tan esencial como la seguridad y las emergencias no tenga todos los recursos necesarios accesibles y sobrados, por lo que no nos sirve que el equipo de Gobierno municipal argumente que esto es por la modificación de la Ley de Contratos, ya que lo que denota es una clara falta de previsión para adelantarse a cambios que han sido bastante anunciados y con tiempo suficiente». Sin embargo, desde el SPLRM sí que consideran que el problema es la nueva Ley de Contratos «al bloquear las compras exigiendo muchos más trámites y complicando el proceso».

Para Larrosa, «esta mala gestión del servicio raya la negligencia, porque no se pueden escatimar recursos en cuestiones de seguridad», y ha afirmado que «ante una plantilla muy mermada y que va a menos, con unos vehículos que no se mantienen debidamente e instrumentos tan básicos como alcoholímetros y rollos de cinta que no se pueden utilizar, da igual los botones del pánico que se instalen, como el anunciado para los comercios del barrio del Carmen».

Además, ha declarado que «ahora entiendo el empeño de la concejala de Tráfico, Seguridad y Protección Ciudadana en montar exhibiciones como la 'Policía Visible' con unos agentes, un cartel y un coche, que quizá no está para funcionar, sólo por fingir unos medios que no tenemos. Creemos que lo debe hacer la concejala es ponerse las pilas, que seguro que para ella sí hay».