El Jardín de Floridablanca ha vuelto a cerrar sus puertas, pero en esta ocasión el motivo no es la precaución ante fuertes rachas de viento como los vecinos vienen viendo con frecuencia en los últimos meses.

Esta vez, la clausura del parque se ha debido a una puesta a punto de los centenarios árboles que alberga. Floridablanca ha echado el cierre este lunes mientras los técnicos podan las ramas de los ficus, trabajo que se alargará, según fuentes municipales, durante dos semanas.

Los vecinos más curiosos han podido ver estos días cómo los jardineros y técnicos podaban los árboles como si de un Tarzán de ciudad se tratase, colgándose de los árboles ante la mirada de pequeños y mayores.