La defensa de Hristo I., el hombre que lleva más de un año en prisión provisional tras mandar a la UCI de un puñetazo al joven Andrés Martínez, ha vuelto a pedir su libertad. El motivo, según alegan los letrados, es que hay informes contradictorios sobre el estado de salud de la víctima, que llegó a estar en coma.

Por esta razón, los abogados del que fuera portero del Grupo Temporáneo han recurrido a dos peritos para que elaboren sus propios informes sobre el joven.

En su opinión, no queda claro hasta qué punto ha afectado al olfato del chico aquel puñetazo (que fue grabado con el móvil por una testigo). En este sentido, un médico habla de «pérdida severa del olfato», aunque no total, mientras que otro facultativo sí hace referencia a la anosmia, que implicaría la ausencia entera de este sentido.

La defensa de la víctima del conocido como ´caso 609´, por ser el pub donde empezó todo, tiene cinco días para presentar alegaciones.

Andrés, por su parte, tiene este mismo mes otra revisión, tanto con el forense como con el otorrino. El joven y su pareja han sido recientemente padres de una niña, una circunstancia a la que aludió la defensa de Hristo en la última vista para pedir su libertad. Entonces, los abogados llegaron a apuntar que una prueba de que Andrés estaba mejor era que iba a tener un bebé.

La titular del Juzgado de Instrucción Número Nueve de Murcia, Olga Reverte, apuntaba en agosto, cuando volvió a denegar la libertad de Hristo, que el arraigo por sí solo no garantiza su presencia a disposición del proceso y del juicio.

«La víctima no es Hristo: la víctima es Andrés Martínez Cerón. Un chico al que la actuación de una persona le ha cambiado la vida para siempre», explicaba entonces al tribunal el letrado del chico, Francisco Adán.

Andrés pasó 42 días en el hospital, donde llegó a temerse por su vida.