El proyecto del soterramiento de la Alta Velocidad a su llegada a Murcia tuvo ayer un espacio destacado dentro de la intervención del alcalde de Murcia, José Ballesta, durante el Debate del Estado del Municipio que se celebró en el Salón de Plenos del Ayuntamiento de Murcia. Ballesta, que hizo un repaso por las principales fechas del proyecto, afirmó que «se ha avanzado mas en los últimos dos años que en los 15 anteriores», por lo que pidió una reflexión pausada.

El primer edil llamó a reemplazar los insultos por pactos y debates y, aunque dijo que sabe cuál es su papel, tambien hizo hincapié en que ha tenido que perder en derechos, como «mi derecho a la defensa ante las coacciones o a moverme libremente por mi ciudad», en referencia a los escraches que ha sufrido en su propia vivienda en los últimos meses. Pero afirmó de forma rotunda que «no seré el responsable de que se pare el soterramiento».

Por ello se llegó a preguntar «si todo esto merece la pena», a lo que él mismo se respondió que «la única certeza que persigo es buscar el bien general para que nadie en mi ciudad se vea perjudicado».

En cuando al proyecto de llegada del AVE a Murcia el alcalde de la ciudad explicó que se ha avanzado al pasar en dos años de un plan que contemplaba el soterramiento de 530 metros a otro en el que se incluyen más de 1.100 metros soterrados, sumando la zona de playa de las vías, la Senda de Los Garres y Nonduermas. «A lo que se une el adelanto del plan de trabajo con unas obras que comenzarán el miércoles con la introducción de pantallas de hormigón» en la zona más al sur de la Estación de El Carmen, mismo día en el que está previsto que se reúna la Comisión de Seguimiento para dar detalle de todos los avances.

En cuanto a los 'tropiezos' que está sufriendo el proyecto para la llegada de la Alta Velocidad, el alcalde de Murcia dijo que «hay dos maneras de llegar al desastre: pedir lo imposible o retrasar lo inevitable».

Los grupos de la oposición señalaron ayer durante sus turnos de intervención que el modelo de ciudad propuesto por el PP no coincide con la realidad del municipio y lamentaron que la mayoría de proyectos anunciados no se han materializado a pesar de que el tiempo de la legislatura se está agotando.

El concejal no adscrito Javier Trigueros, el primero en intervenir, criticó cómo se está gestionando el proyecto del AVE y solicitó una rehabilitacion integral de la actual estación de El Carmen.

Por su parte, la concejala y portavoz de Ahora Murcia, Alicia Morales, criticó que los proyectos no se fiscalicen y la «opacidad» que existe en muchos de las iniciativas mencionadas por el primer edil. Morales llegó a señalar que la gestión que se ha hecho del tema del soterramiento «ha creado una fractura social» que será difícil de resolver. Desde Cambiemos Murcia, Nacho Tornel tuvo palabras de recuerdo para los trabajadores del Ramón Gaya, acusó al PP de no querer fiscalizar los contratos externalizados y afirmó que «la deuda viva del Ayuntamiento equivale al 102 por ciento de nuestros ingresos».

El portavoz de Ciudadanos, Mario Gómez, reclamó una reducción de la tarifa del agua y bonificaciones para el IBI, al tiempo que recordó a Ballesta los problemas de calefacción de los colegios y el cierre de la oficina de turismo en pleno mes de agosto.

Desde la bancada socialista, la portavoz del PSOE, Susana Hernández, hizo un alegato a la ciudad ideal que le gustaría que fuera Murcia para seguidamente «bajar los pies a la tierra» y señalar las carencias que tiene el municipio en materia de transporte, la situación del barrio de La Paz o la falta de confianza de los ciudadanos en el proyecto del soterramiento. La portavoz popular, Rebeca Pérez, fue la encargada de cerrar el turno de los grupos y avaló la gestión del Gobierno municipal e insistió en que se están cumpliendo todos los compromisos electorales con más de 200 proyectos concretos ya puestos en marcha y que «están transformando la ciudad».