El presidente de Adif, Juan Bravo, quiso justificar ayer el enfado del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, con las protestas de la Plataforma Pro-Soterramiento que dio lugar al endurecimiento de la actuación policial tras la visita a la Región que realizó la semana pasada, cuando recorrió la línea de Alta Velocidad entre Elche y Murcia en un tren laboratorio. Tras el encuentro que De la Serna mantuvo con los representanes de la Plataforma, la Policía intervino por primera vez para desalojar a los vecinos, causando lesiones a algunos de ellos.

Durante el encuentro que mantuvo ayer con los medios de comunicación, Juan Bravo explicó que al responsable de Fomento le había parecido extremadamente peligroso que en las imágenes de las concentraciones vecinales aparecieran niños jugando sobre la vía mientras sus padres se manifestaban. A su juicio, estas situaciones pueden llevar a «que los niños de seis u ocho años pudieran meterse algún día a las vías», sin ser conscientes del peligro que implica la invasión del tendido.

Advirtió igualmente que la noche anterior a la llegada de De la Serna hubo actos de «sabotaje» en las vías, aunque no llegaron a causar daños al detectarse la presencia de ladrillos y cemento con antelación. Juan Bravo recordó que también habían aparecido quemadas varias máquinas en las obras de Adif la madrugada del día de la Romería.

No obstante, admitió que la Policía pudo haberse excedido la noche de la concentración en el túnel del Rollo al recluir a los manifestantes bajo la vía.