Ocho de cada diez fuentes emisoras de ruido en las zonas de ocio corresponden a terrazas, por lo que estos espacios se convierten en el principal escollo del Ayuntamiento para reducir las molestias de contaminación acústica. Los técnicos de la Concejalía de Urbanismo, Huerta y Medio Ambiente han identificado durante el estudio que han hecho del municipio 77 fuentes emisoras de ruido derivadas del ocio, de las que 60 son terrazas y veladores y las 17 restantes corresponden a espacios de acumulación o movimiento de personas.

Estos son algunos de los resultados que se presentaron ayer durante la reunión del Consejo Sectorial del Ruido, presidida por el concejal responsable, Antonio Navarro Corchón, y durante la que se avanzó sobre la propuesta de 'Buenas Prácticas Contra el Ruido en el Municipio de Murcia' y se abordaron los expedientes tramitados durante el pasado ejercicio.

El ámbito de actuación para hacer el Mapa de Ruido de Ocio se ha actuado sobre las zonas de la Universidad, Alfonso X, San Lorenzo, Santa Eulalia, San Juan y San Pedro. Además se han llevado a cabo distintas mediciones de monitorización con estaciones ubicadas en 20 puntos del municipio, a las que se suman otras 3.600 mediciones itinerantes para delimitar las áreas más afectadas.

El estudio ha determinado que se supera en determinados horarios y zonas los objetivos de calidad acústica y existen tres tramos de superación del límite, en intervalos de 5 decibelios.

Una vez obtenidos estos resultados, las próximas actuaciones serán la redacción de los planes zonales y la aprobación de ZPAE (Zonas de Protección Acústica Especial). Toda la información de los mapas de ruido se incorporará en un SIG (Sistema de Información Geográfica) que podrá ser consultado por los ciudadanos que lo deseen.

Campaña de inspección

El Consejo Sectorial ha estudiado además los expedientes incoados en materia de ruidos el pasado año y ha analizado la campaña conjunta de inspección a locales del sector del ocio en el centro de la ciudad, entre la plaza de Santa Eulalia, plaza Universidad y San Lorenzo, que se llevó a cabo en los últimos meses con la participación de varios servicios municipales y que han permitido revisar cerca de 70 locales.

En cuanto a ruidos, las deficiencias que más han aparecido y que ha dado lugar a la aparición de los correspondientes expedientes sancionadores son el disponer de televisores o hilo musical sin autorización; actividades con música que no se han adaptado a la Ordenanza Municipal de Protección del Medio Ambiente contra la Emisión de Ruidos y Vibraciones; y la instalación de equipos de aire acondicionado y salidas de ventilación en fachada que no cumplen con las distancias indicadas en la Ordenanza de Protección de la Atmósfera.

Además, durante el año 2016 se tramitaron en el servicio de Medio Ambiente un total de 620 expedientes de ruido, ya fueran por moletias vecinales (344), ruido de animales (15) o el uso de megafonía en la vía pública (11), entre otros motivos.