Tras un intenso debate de cerca de cuatro horas el Presupuesto de 2017 del Ayuntamiento de Murcia salió adelante ayer en el Pleno extraordinario gracias a la abstención de los cuatro concejales del Grupo Municipal Socialista (Begoña García Retegui no acudió y Sebastián Peñaranda aún no ha tomado posesión de su acta) y del edil no adscrito Javier Trigueros. El concejal de Hacienda y Contratación, Eduardo Martínez-Oliva, fue el encargado de presentar las cuentas de este año que, pese a llegar siete meses tarde, ascienden a 408 millones de euros, lo que supone un incremento cercano al 1 por ciento. Una de las características del Presupuesto que destacó el responsable de la Concejalía es que se destinarán a barrios y pedanías casi 72 millones de euros, gestionando éstas directamente 17,6 millones de euros gracias al apoyo de una Oficina Única que facilitará el trabajo diario de las juntas municipales.

La oposición se mostró muy crítica con estos presupuestos al considerar que «no solucionan los problemas reales de los ciudadanos y se limitan a repetir el modelo de años anteriores». Por ello, tanto Ciudadanos, como Cambiemos Murcia, Ahora Murcia y el concejal no adscrito Luis Bermejo, que votaron en contra, coincidieron en considerar que el presupuesto repite las mismas inversiones y proyectos no ejecutados en ejercicios anteriores sin responder a los problemas del municipio y dijeron no entender por qué los socialistas «vuelven a tropezar en la misma piedra» tras dar su apoyo también a las cuentas de 2016 y ver que muchas partidas no se han ejecutado.

Además del proyecto de Presupuestos de 2017 ayer se dio el visto bueno al segundo punto del día, el proyecto de financiación extrapresupuestaria de 15,9 millones de euros para ejecutar obras en pedanías a cargo del remanente de tesorería, un punto que generó polémica y que hizo intervenir el secretario del Pleno después de que se llegara a plantear que era una moción encubierta. Finalmente fue aprobado con los votos a favos de PP, PSOE y Cs, en contra de Luis Bermejo, la abstención de Ahora Murcia y Javier Trigueros y el abandono del Pleno de los concejales de Cambiemos.