El Ayuntamiento de Murcia solicitará al Ministerio autorización para poder endeudarse y pedir un crédito de 25,5 millones de euros para inversiones, un trámite que ya ha recibido el visto bueno por parte del Gobierno central, según confirmó ayer el concejal de Hacienda y Contratación, Eduardo Martínez-Oliva, quien aseguró llevar un mes de reuniones con el Ministerio para aclarar el informe del Banco de España que imputa al Ayuntamiento los 173 millones de deuda de Tranvía de Murcia y que se dio a conocer el jueves.

El responsable de Hacienda explicó que el endeudamiento del Ayuntamiento se ha reducido en 23 millones de euros en los dos últimos años y se sitúa en el 43% (150 millones de euros), «ya que estamos amortizando más cantidad de los préstamos que pedimos», a lo que añadió que el de Murcia «es uno de los cosistorios más saneados». Martínez-Oliva, que quiso aclarar la situación para que no haya confusiones, dijo que la deuda que refleja ese informe es virtual, no real, e informó de que el endeudamiento de 173 millones de euros de la empresa concesionaria del tranvía de Murcia que el Banco de España ha contabilizado como deuda pública del Ayuntamiento «no costará ni un solo euro a ningún murciano», ya que debe pagarla la empresa y en el caso de que ésta quebrara el Consistorio no tendrá que hacerse cargo de la misma.

En este caso indicó que la situación de Murcia y Zaragoza son distintas, ya que ésta última ciudad participa con un 25% en la empresa que gestiona su tranvía, «pero Murcia no, ya que somos independientes y no sabemos por qué nos contabilizan su deuda a nosotros».

Ante esta situación el Ayuntamiento ha decidido recurrir ese informe y presentó un recurso a principios de este mes ante el Banco de España, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal y la Intervención General, y llegará a plantear un contencioso-administrativo si no se acepta su reclamación. En cualquier caso, insistió en lanzar un mensaje de tranquilidad, puesto que «será la concesionaria del tranvía la encargada de responder sobre ese endeudamiento, al que no se destinará ni un euro del presupuesto municipal ni tendrá incidencia alguna en la inversiones, prestaciones de servicios o pago a proveedores», subrayó. Aún así, reconoció que el informe del Banco de España sí tendrá dos consecuencias: la obligación de elaborar un Plan Económico Financiero (PEF) y la necesidad de pedir autorización al Ministerio para nuevos endeudamientos.