La avenida Alfonso X El Sabio se convertirá en un gran bulevar en el corazón de la ciudad de más de 14.400 metros cuadrados para el disfrute de los peatones. Así lo anunció ayer el alcalde de Murcia, José Ballesta, durante la presentación del proyecto de peatonalización de este entorno junto al concejal de Fomento, Roque Ortiz.
Con la reforma de esta zona del centro de la ciudad el Ayuntamiento apuesta por un proyecto sostenible con el que se reducirá la contaminación acústica, mejorará la tranquilidad vecinal y se dará prioridad al peatón y la bici limitando el acceso de vehículos sólo a los residentes, taxis y carga y descarga para los establecimientos comerciales.
La peatonalización de Alfonso X permitirá conectar la plaza Circular con la Glorieta, ya que en este trayecto queda integrada la calle Trapería, por lo que el espacio destinado al peatón superará los 50.000 metros cuadrados, el equivalente a cinco campos de fútbol. Las obras se llevarán a cabo en dos fases: la primera reformará la zona entre la plaza de Santo Domingo y el cruce con Jaime I, tendrá un coste de tres millones de euros y un periodo de ejecución de ocho meses; la segunda fase irá desde Jaime I y hasta la Circular y, aunque aún no existe el proyecto, desde Fomento calculan que la inversión estaría en torno a los 2,7 millones de euros. Teniendo en cuenta que las obras de la primera fase arrancarán antes de Navidad se espera que los peatones puedan disfrutar de este espacio renovado tras el verano de 2018, para la Feria de Septiembre.
El alcalde destacó el papel que ha tenido la participación ciudadana, hasta el punto de que el proyecto inicial ha sido modificado y se ha ampliado la zona de peatonalización gracias a las propuestas y alegaciones de los diferentes colectivos vecinales y asociativos, consensuándolas con las observaciones técnicas del Colegio Oficial de Arquitectos y la Dirección General de Bienes Culturales.
Carril bici junto a Las Claras
Con la peatonalización de este espacio desaparecerá la calzada de vehículos de la zona este (la que hay junto a la iglesia de Las Anas) para dar prioridad al viandante, restringiendo el tráfico de vehículos a residentes, transporte público (taxis), zona escolar y carga-descarga en horario regulado, circulando en una única dirección hacia Santo Domingo por la calzada oeste, la existente junto a la iglesia de Las Claras. De esta forma se ha previsto que los vehículos de los residentes accedan mediante un sistema de identificación sin barreras que evitará la instalación de pivotes, con el que una cámara leerá la matrícula de los vehículos autorizados, limitándose la velocidad en la zona a un máximo de 10 kilómetros por hora.
El proyecto incluye la habilitación de un carril bici de dos sentidos que discurrirá por la actual calzada oeste, manteniendo el actual sistema público de alquiler de bicicletas en las inmediaciones de la nueva avenida. Sin embargo, la parada actual de taxis se trasladará al lateral de la calle de la plaza Preciosa y la subida y bajada de niños para el colegio será en el lateral de Gutiérrez Mellado, según explicó el concejal Roque Ortiz.
El área actual de terrazas de Alfonso X será reconfigurada sin incrementar sus dimensiones y se implantará un nuevo sistema de recogida inteligente de residuos e iluminación LED adaptable de bajo consumo.
El director de proyectos de la Concejalía de Urbanismo, Jesús López, indicó que el arbolado aportará confort climático y servirá para delimitar las zonas, en las que el peatón se verá más cobijado, para lo cual se respetarán las plataneras existentes a lo largo de todo el paseo y se plantarán más ejemplares, como una línea de naranjos que recorrerán todo el lateral de poniente, arbolado que aportará aromas durante la época de floración y una visión huertana cuando esté en la etapa del fruto. «Tendremos el ambiente de la huerta en la ciudad», dijo. A las plataneras y naranjos se unirán también palmeras, llegando a triplicar la vegetación actual y creando nuevos espacios de sombra natural. Para ello incluso está previsto que los bancos para descansar estén insertados en las propias jardineras, reforzando el valor peatonal.
López también hizo referencia al tipo de pavimento que se utilizará y en este caso se ha optado por piedra del cabezo que tendrá varias tonalidades para diferenciar unas zonas de otras. Así, está previsto un dibujo de 10x10 para delimitar el espacio del lateral para vehículos, otra imitando al parqué para la zona peatonal y un pavimento ranurado para la señalización de personas ciegas durante todo el recorrido.
Pese a que la apuesta del Ayuntamiento es la peatonalización de todo este espacio, el cruce de Jaime I se mantendrá, integrándolo en el recorrido con un nuevo pavimento, ya que «su eliminación no es posible», confirmó el director de proyectos de Urbanismo.
La vicedecana del Colegio de Arquitectos, María José Peñalver, subrayó que ellos defienden la movilidad, mientras que el director general de Bienes Culturales, Antonio Lorca, recordó que en el proyecto definitivo se ha tenido en cuenta el informe de la Comunidad para traer «una ciudad antigua al siglo XXI».
