El concepto de familia ha cambiado en muchos sentidos para algunas personas, y poco para otras. Los matrimonios más tradicionales entienden que lo más arraigado en la sociedad es lo común, y lo común es encontrar en la estructura de una familia a un padre, una madre y los hijos; aunque entienden que las familias monoparentales, de padres del mismo género o progenitores que deciden no casarse o no ser pareja de hecho comienzan a reivindicar un hueco más justo en la sociedad.

Por otro lado, las parejas menos conservadoras, y por lo general jóvenes, entienden que ahora hay mucha diversidad de familias, «y esa variedad de posibilidades deberían de aceptarlas todo el mundo», además de entender que una familia basada en la jerarquía patriarcal va desapareciendo.

Estas son algunas de las conclusiones que reflejaron ayer diversas parejas que se reunieron en el parque de La Seda para celebrar el Día de la Familia. Evento en el que participaron diversas asociaciones que trabajan en favor de revalorizar el principio social que suponen las familias a día de hoy, y que realizaron numerosos talleres creativos, así como actividades de arte, música o teatro que entretuvieron a los murcianos que quisieron pasar un domingo diferente.

«Antes en el cole se enseñaba el concepto de una familia como una madre y un padre, ahora la enseñanza evoluciona y se explica a los niños que las posibilidades son muy diversas. Hoy se están creando muchos valores en referencia a concebir una nueva visión de familia, y añadimos a estos principios algunos como el respeto o la empatía», explicaban desde el colectivo educativo. La conciliación es la principal barrera con la que se encuentra una pareja para poder formar una familia, «no todo el mundo puede vivir con un sueldo, y no todos los sueldos dan para vivir», apuntaban algunas madres.

En palabras del alcalde de Murcia, José Ballesta, el acceso a una vivienda o al mercado laboral son dificultades con las que se encuentran las familias. En referencia a la estructura familiar opina que «ahora hay más dialogo, más participación de todos los miembros de la familia, pero la responsabilidad sigue recayendo sobre los padres y no pueden cederla a nadie». En este sentido opina igual la consejera de Familia, Violante Tomás, que considera a las familias como estructuras que ya no son «estáticas».