Las clases en el colegio Jesuitinas de Murcia, ubicado en la carretera de Puente Tocinos, se han suspendido para mañana lunes y para el martes, debido al incendio originado en un aula de la primera planta del centro escolar. Según indica el director, Antonio Grau, el miércoles, a menos que los técnicos digan lo contrario, todo volverá a la normalidad.

El fuego se originó pasadas las dos de la madrugada, cuando una profesora del centro pasaba por la carretera y dio el aviso. Hasta la zona acudieron los Bomberos de Murcia, que desplazaron cinco vehículos para apagar las llamas.

Horas más tarde, sobre las cinco de la madrugada, el director del centro y algunos profesores pudieron hablar con los bomberos, que les comunicaron que el incendio afectó principalmente a la sala donde, por causas aún desconocidas y que ya se están estudiando, se originó el incendio, aunque el humo y el fuerte calor afectaron a gran parte del edificio y tiñeron las instalaciones de negro, a excepción de la planta baja, en la que las cañerías han quedado derretidas por el calor y, como consecuencia, la zona se ha inundado. "Todos comentan que lo ha provocado un cortocircuito, pero son sólo comentarios", indica el director. Además, los bomberos se pusieron en contacto con el personal responsable del centro y de mantenimiento para abrir las demás aulas del colegio y ventilar todo el edificio, asegurándose de que las llamas no se extendían.

De momento, la zona ha quedado acordonada por precaución y los profesores y el personal del centro se encargarán de limpiar y pintar las instalaciones durante mañana y el martes, para que el miércoles todo pueda estar en condiciones. "Pintaremos las zonas 'más de paso' por cuestiones de tiempo. Además, algunas clases sólo necesitan que limpiemos el polvo acumulado", explica Grau, además de agradecer la gran respuesta de los trabajadores de Jesuitinas para ofrecer su ayuda en todo lo que se necesite y sentirse, "dentro de lo malo", satisfecho porque el incendio se haya originado en fin de semana, con el colegio vacío.