Después de tres meses con los presupuestos de 2016 prorrogados el tiempo de negociación en la Glorieta está llegando a su fin. El concejal de Hacienda y Contratación, Eduardo Martínez-Oliva, quiere sacar las cuentas de este año adelante y reconoce que «esta situación no se puede alargar por más tiempo». Para ello está ´rondando´ a los grupos de PSOE y Ciudadanos, con los que en los últimos días se están intensificando las reuniones, con el fin de incorporar algunas de las propuestas de la oposición y así lograr su respaldo, ya sea en el pleno ordinario del 30 de marzo o en una convocatoria extraordinaria.

Para ello, Martínez-Oliva está buscando la forma de cumplir con una de las mayores reclamaciones de estos grupos de la oposición y que se centra en las inversiones en pedanías. En este sentido, el responsable de Hacienda ha sacado las cuentas y ha logrado habilitar 12 millones de euros del remanente de tesorería para estos proyectos, cantidad que sería extrapresupuestaria y no alteraría los capítulos de inversiones que ya hay previstos. Estos 12 millones se sumarían a los más de 30 que el proyecto de presupuestos contempla en 2017 y a los 16 que también tiene previstos invertir el Ayuntamiento de Murcia para los proyectos de la recuperación del yacimiento de San Esteban, la rehabilitación de la Cárcel Vieja y la puesta en marcha del Corredor Verde. Cerca de 60 millones que se invertirían este mismo año en inversiones, tanto en el núcleo urbano como en barrios y pedanías de Murcia, según el concejal.

Además, Eduardo Martínez-Oliva afirma que también se ha incluido en el proyecto de presupuestos otras peticiones de PSOE y Ciudadanos como la mejora del transporte o en políticas de empleo municipales. En este caso afirma que se encuentran en unos días cruciales en los que esperan recibir el respaldo necesario para sacar adelante las cuentas de 2017.

Desde el PSOE el portavoz del grupo municipal, José Ignacio Gras, puntualiza que están terminando de concretar las propuestas con el plan especial de pedanías como eje central, «un proyecto para reequilibrar las inversiones», aunque también quieren que se aumenten las partidas para el plan de vivienda de alquiler, la revisión del PGOU y la creación del consejo municipal de consumo. «Es una forma de forzar, con nuestros seis concejales, que se escuchen las peticiones de los ciudadanos y que se ejecuten las cantidades que aún hay pendientes», apunta Gras.

Mecanismo de control

Otra de las peticiones de los socialistas es que se establezca algún mecanismo de control (como una comisión de control y seguimiento del presupuesto) para que se ejecuten los proyectos, ya que en las cuentas de 2016 se ha quedado un 70 por ciento de las inversiones sin realizar. Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Mario Gómez, ha indicado que «vamos a exigir compromisos firmes, con fechas concretas para su aprobación y partidas presupuestarias vinculadas, para que no puedan ser modificadas, como se ha hecho hasta el momento».