El sonido de varios disparos asustó a los vecinos que se encontraban ayer por la mañana en el centro de la pedanía murciana de Puebla de Soto. Por motivos que todavía se ignoran, un hombre, conocido en el pueblo como 'Palancas', se había asomado al balcón de la segunda planta de su casa y había efectuado al menos cuatro tiros al aire con una escopeta de caza, según señalaron fuentes policiales a este diario. Fue sólo un susto, que no pasó a mayores y no deparó daños personales: minutos después, cuando llegó la Policía al hogar, 'Palancas' depuso su actitud y se entregó sin oponer resistencia.

Los agentes redujeron sin incidencias al hombre, que acabó finalmente arrestado por tenencia ilícita de armas, amenazas y tráfico de drogas, según indicaron las mismas fuentes policiales, que añadieron que el propio detenido confesó que poseía dos bolsas de cogollos de marihuana, así como 60 plantas de ´maría´ custodiadas en una nave próxima a la vivienda.

El incidente ocurrió a media mañana -pasadas las 11 horas- en la esquina de la calle Mayor con la vía Amargura, donde reside el apresado en una vivienda familiar de dos plantas. Un vecino avisó a la Policía que había escuchado disparos en Puebla de Soto, por lo que hasta el lugar se desplazaron tanto miembros de la Policía Local de Murcia y de Alcantarilla como efectivos de la Policía Nacional de la comisaría murciana de El Carmen.

Los agentes acordonaron las inmediaciones de la zona, cortando el acceso a los viandantes, antes de proceder a la entrada en la vivienda. Sin embargo, ante la llegada de la Policía, el arrestado «se tranquilizó» y se entregó. Se trata de un hombre de 44 años, oriundo la pedanía y cuya identidad no trascendió ayer, aunque sí es conocido entre los vecinos como 'Palancas', un mote familiar.

La Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación y procedió al registro del domicilio. Además del arma con el que efectuó los disparos -una escopeta cargada de postas-, también encontraron una catana y un hacha en el interior del edificio, que fueron interceptadas. Y tras revelar el detenido que guardaba estupefacientes, la UDYCO se incautó además de un total de 60 plantas de marihuana. La Policía Científica también se desplazó al lugar de los hechos.

Algunos vecinos manifestaron a este periódico que el arrestado había mantenido una discusión con un hombre antes de regresar a su casa y efectuar los disparos, aunque este extremo no fue confirmado por la Policía. «Sufría problemas mentales y era conflictivo», contaron otros vecinos.

«Un incidente escandaloso»

El incidente causó revuelo en el pueblo. Algunos de los vecinos contemplaban la escena detrás de la zona acordonada mientras la Policía procedía a entrar al edificio. Todo volvía a la normalidad a la hora de comer. Por su parte, el alcalde pedáneo, Francisco Galera, lamentó que se produjera «este escandaloso incidente».