Una niña de seis años, intolerante al gluten, tuvo que ser ingresada el pasado mes en un hospital de Murcia, por una inflamación del intestino delgado y del colon (enterocolitis), tras ingerir en un local comida con dicha proteína, cuando los padres habían avisado previamente de la intolerancia de la menor.

Los padres de la menor, que han denunciado a Salud Pública, perteneciente a la Consejería de Sanidad, critican, asimismo, la "indefensión social y sanitaria" en la que se encuentran los celiacos en la Región.

Los hechos tuvieron lugar el pasado mes de noviembre cuando reservaron en este establecimiento, que ofrece menú sin gluten, situado en una céntrica plaza de la capital murciana.

"Tras varios errores subsanados con la lectura de los ingredientes que en la etiqueta del producto aparecían en letra minúscula y en varios idiomas, a las dos horas de haber comido las niñas, mi hija de seis años, celiaca sintomática extrema, busca mi cobijo y me dice flojito 'Mamá, me duele la barriga'".

Automáticamente la pequeña empieza a vomitar sin parar y termina hospitalizada. La reacción de la niña a la comida en el restaurante hizo que los encargados admitieran que sirvieron pasta con gluten en una mesa de cinco niñas de dos a seis años en la que habían dos celiacas "y en la que pedimos todo sin gluten para evitar contaminación cruzada".

Actualmente, la niña sigue en proceso de recuperación, tras sufrir una enterocolitis aguda por ingesta de gluten.

Ante lo ocurrido los padres de la menor denuncian el poco respaldo con el que cuentan los celiacos desde la Administración, "sentimos una indefensión social y sanitaria total", primero porque "la sociedad en la que nos encontramos cree entender de celiaquía, y lo primero que hacen es decirte que cierto supermercado tiene muchos productos sin gluten y que con eso, estamos salvados".

Indefensión social y sanitaria, continúan, "cuando salimos fuera de casa y vamos a un restaurante que dice que ofrece menú sin gluten y lo primero que te sirve es un plato de jamón con piquitos y te dice que los apartes. Indefensión sanitaria cuando por el hecho de no tomar medicinas de laboratorio ponen nuestros productos específicos cotidianos (pan, galletas, pasta) a precio de gambón y cigalas el kilo, cuando nuestro alimento es nuestra medicina".

"Indefensión social cuando por el hecho de querer evitar la contaminación cruzada y dices que no metan la mano en la bolsa de gusanitos de tu hija a un niño que está comiendo un bocadillo con gluten, su madre te dice que debes relajarte que por un poco no pasa nada", explican, "pero sí que pasa, el único poco de gluten que pueden tomar los celíacos son las pocas partes por millón (hasta un máximo de 20ppm) que pueden contener los productos certificados sin gluten con el sello europeo o marca de garantía de FACE". Una sola miga de pan, subrayan, ya supera esas 20 ppm.

Indefensión social y sanitaria cuando los comedores de las universidades no ofertan menú libre de gluten "con garantías" y tras una larga jornada de clases por las mañanas y prácticas por las tardes, "los jóvenes de nuestra Región tienen que andar con un tupper todo el día".

En un escrito al que ha tenido acceso Europa Press, los padres de esta menor lamentan que no haya una ley que controle la presencia de trazas en los platos de las cartas de los restaurantes.

"No tenemos una mano tendida para trabajar juntos y poder dar la respuesta adecuada a esta situación", indican, para concluir el escrito señalando que "las buenas intenciones de las personas que están trabajando por el colectivo celiaco se desvanecen cuando te das cuenta que sin el respaldo de la Administración la batalla está perdida".

Reuniones con los administradores

Así la Asociación de Celiacos de la Región de Murcia (ACMU) tiene previsto solicitar una reunión con la consejera de Sanidad, Encarna Guillén y el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Murcia, Felipe Coello para tratar todas estas cuestiones y buscar más apoyo institucional.

Por el momento, subrayan que lo único que se ha hecho desde la Administración es la aprobación de una moción "de apoyo a celiacos, familias y asociaciones que trabajan por mejorar su vida", en el mes de octubre por el Ayuntamiento de Murcia, en la que ya se instaba al Gobierno regional "a fomentar la inclusión de menús específicos para afectados por la enfermedad celíaca en centros sanitarios y escolares supervisados por profesionales dietistas, así como la potenciación del área de inspección sanitaria, en especial, en centros sanitarios y escolares".

En la moción se instaba, asimismo, al Ejecutivo murciano a fomentar un sello regulador único y oficial de la Comunidad Autónoma para identificar los establecimientos de restauración que ofrecen menús aptos para celiacos.