Murcia y Beniel tienen un problema común, las inundaciones causadas por la rambla de Tabala, que dentro del municipio afectan a amplias zonas de Alquerías y Zeneta. Para evitar más problemas, ambas localidades van a hacer un frente común para pedir al Gobierno del país que se lleve a cabo esta obra hidráulica básica.

La alcaldesa de Beniel, Mari Carmen Morales, visitó en la mañana de ayer el ayuntamiento de Murcia para reunirse con Ballesta. Los plenos de ambos consistorios aprobaron mociones para reivindicar su construcción. «Para Beniel, esta presa supone un factor imprescindible para su desarrollo. Y es que el municipio se encuentra entre dos elementos que limitan su desarrollo urbanístico, uno es el río Segura, y el otro el paso del tren por la localidad. Esta cuestión hace necesario la construcción de una presa, puesto que su única posibilidad de urbanizar para seguir creciendo es la zona de la huerta, al otro lado de las vías del tren, que a su vez más afectada se ve por las inundaciones de la rambla Tabala», según informa el consistorio benielense en un comunicado.

El grupo municipal socialista, al frente del gobierno local de Beniel, llevó a Pleno hace unos meses una moción que fue aprobada por el resto de partidos políticos para instar al Gobierno de España a retomar la construcción de la presa Tabala, para que asegure el fin de las inundaciones. Y es que la CHS manifestó en 2014 cuando el Ayuntamiento aprobó de manera provisional el Plan General de Ordenación Urbana que, «aproximadamente un 60% de la superficie del municipio se encuentra afectada por la zona inundable de 500 años correspondiente a la Cañada de Tabala».

Por otra parte, el Pleno municipal de Murcia aprobó también una moción del PSOE para la construcción de una presa que evite las inundaciones. La iniciativa tuvo el respaldo del PP y de Ciudadanos y aprobó pedir al gobierno central su construcción.