Si la piscina y el cine de verano del Murcia Parque se publicitaron durante décadas como 'la playa de Murcia', en referencia a la lejanía de la ciudad a la costa y como eslogan refrescante para los murcianos, el nuevo proyecto municipal para dar un acceso al río Segura desde el Jardín Chino hará que ese sueño se convierta en realidad de nuevo, pues el Segura tuvo algunos arenales en el cauce del río en el que los antiguos vecinos de la ciudad tomaban el sol y se bañaban. La intención del Ayuntamiento es que el jardín, que se encuentra en la margen izquierda y que ocupa parte de lo que en el siglo pasado fue el parque Ruiz Hidalgo, tenga acceso directo al Segura con unas terrazas escalonadas que terminarán en una explanada de arena similar a una playa.

Para ello habrá que tirar el muro que protege a la ciudad del cauce y el proyecto ya está desde hace semanas en manos de la Comisaría de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), como asegura el concejal de Urbanismo, Antonio Navarro Corchón, quien espera una respuesta en breve y explica que costará unos tres millones de euros, que se esperan presupuestar para el año próximo por las concejalías de Urbanismo y de Calidad Urbana.

«Estamos a la espera de la respuesta de la Comisaría de Aguas para empezar la planificación detallada para la licitación y que entre en los presupuestos de 2017. Se hará con terrazas escalonadas, miradores voladizos y habrá accesos para piraguas y bicicletas», asegura Navarro, quien destaca que «se complementará con la construcción del carril bici en la mota del río, cuyo pliego de condiciones ya está preparado, así como la iluminación del paseo y la adecuación de escaleras».

El objetivo es hacer del Segura el mayor pulmón verde del municipio, como parte del proyecto 'Murcia Río', el plan estrella del alcalde, José Ballesta. El parque que tendrá a sus pies la playa fluvial de Murcia recibió el nombre del alcalde de la ciudad Jerónimo Ruiz Hidalgo, quien en 1908 inauguró la obra por la que el soto de la margen izquierda del río pasó a convertirse en un jardín sobre el que iba a pivotar buena parte de la vida murciana durante cincuenta años. En torno a 1960 dejó de existir el Parque de Ruiz Hidalgo, para dejar paso a la actual avenida del Teniente Flomesta. Después, se crearía el Jardín Chino, recordando a esa zona verde.

Los técnicos municipales han diseñado una bajada al río demoliendo parte de los muros actuales y dejando un acceso fácil y cómodo para bicicletas, piraguas y peatones, adaptado para discapacitados. También se preveía un lago artificial junto al cauce y se hará un importante trabajo de replantación de árboles autóctonos, con la colaboración de Anse.