La zona de La Alberca y El Verdolay más próxima al límite del Parque Regional El Valle-Carrascoy, tradicionalmente lugar de veraneo y descanso de la burguesía murciana, no pasa por su mejor momento. Y es que el deterioro de las viviendas que la componen -casonas o mansiones con amplios jardines y numero arbolado- empiezan a dejar notar el paso de los años y la dejadez de sus propietarios, según el Grupo Municipal Socialista, que considera que se les debe exigir por ley el mantenimiento de las parcelas para evitar que provoquen problemas en la vía pública, como el que ha ocurrido esta semana en la calle de La Paz..

En los últimos años, muchos propietarios han optado por abandonar las casas. Una de ellas, en una amplia parcela de la calle La Paz, en la intersección con la calle Olivos, ha visto cómo esta semana se desprendía un pino de grandes dimensiones sobre la acera y la calzada, sin graves consecuencias. Sin embargo, provocó el derribo de una señal de tráfico y la ocupación de espacio y aceras públicas, con el consiguiente riesgo para peatones y vehículos que transitan por esas calles.

Ante situaciones como ésta, «que lamentablemente se vienen produciendo a menudo», el Grupo Socialista considera que el ayuntamiento de Murcia está obligado a exigir a los propietarios a mantener en buen estado las parcelas y las viviendas. «Los responsables municipales de Calidad Urbana y Vía Pública, así como los de Cultura, deben velar por el mantenimiento adecuado de estas viviendas catalogadas, y en el caso de caídas de árboles o de muros, reclamar a los propietarios los gastos ocasionados por el deterioro de señales de tráfico, limpieza o retirada de ramas y troncos», afirmó ayer el PSOE en un comunicado. En el referido caso de la calle La Paz, «este fin de semana aún no estaba repuesta la señal de tráfico ni despejada parte de la acera», concluyen.

Para la concejala Begoña García, «es imprescindible que se cuantifique y evalúe el número de casas que se pueden encontrar en esta situación, no solo en La Alberca, sino en otras del municipio de Murcia, con el fin de elaborar un Plan específico para su preservación y mantenimiento, evitando que desparezcan del paisaje consolidado de estas zonas emblemáticas de la capital de la Región».