Los murcianos han bebido más alcohol y cerveza y también han fumado más de lo que tenía previsto el Ayuntamiento, cuyas arcas municipales han ingresado más dinero por los impuestos que gravan estos productos del que se esperaba. Así queda de manifiesto en la liquidación del Presupuesto de la Administración local, que arroja un superávit de 42 millones de euros.

El Gobierno central es el encargado de cobrar los impuestos que se aplican a las bebidas alcohólicas y al consumo del tabaco. De lo recaudado por el Estado, una parte se cede a las corporaciones locales que tienen en estos ´hábitos´ poco saludables de los ciudadanos una fuente extra de ingresos. El ayuntamiento de Murcia tenía previsto ingresar por la cesión del impuesto de alcohol 84.000 euros, una cantidad que se ha visto aumentada hasta llegar a los 92.000 euros; es decir, ocho mil euros más de lo presupuestado. Este incremento en esos ingresos se debe a que en el municipio de Murcia se ha realizado una mayor ingesta de alcohol de lo previsto por la Administración local, explicaron a esta Redacción fuentes municipales.

Lo mismo ha ocurrido con el impuesto sobre la cerveza (este producto tributa aparte del resto de bebidas porque el Estado estima que no lleva la graduación suficiente para considerarlo alcohol). La liquidación del Presupuesto municipal revela que por este concepto la hacienda local ha ingresado 35.400 euros frente a los 26.500 que se habían previsto, lo que supone una cuantía mayor de casi 9.000 euros.

La venta y consumo de cigarrillos también ha supuesto un buen pellizco para el Ayuntamiento, que ha ingresado 1.091.000 euros por la cesión del ´Impuesto sobre las labores del tabaco´, que es como se llama este tributo. Esta transferencia de dinero que le ha hecho el Estado es bastante más cuantiosa que la de la cerveza y el alcohol y está por encima de lo que la Administración local había presupuestado. En ese capítulo, tenía previsto sacar una tajada de 1.050.000 euros, según consta en la liquidación del Presupuesto de 2015.

Este documento, que chequea el estado de los gastos, los ingresos y el cumplimiento de las inversiones, revela también que las arcas municipales han recaudado un 19% más procedentes de la plusvalía y la construcción, debido a la recuperación de la actividad económica. En el IBI, que es el impuesto más importante, el Ayuntamiento ha emitido recibos por valor de 130 millones, cuatro más de los previstos.