La Guardia Civil ha dado un paso de gigante para esclarecer el caso de la mujer que apareció muerta en la madrugada del martes en la Vereda del Reguerón, en la pedanía murciana de Alquerías. Los agentes de la Benemérita detenían en la noche del miércoles a un vecino de Murcia, de 58 años, panadero, que presuntamente había atropellado a la mujer en la carretera y se había dado a la fuga. El arrestado fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción Número 7 de Murcia, cuyo titular dictaminó su puesta en libertad, aunque acusado de dos delitos, homicidio por imprudencia y omisión del deber de socorro, según fuentes del Gabinete de Comunicación del Tribunal Superior de Justicia de la Región de Murcia.

Durante su declaración en sede judicial, el detenido reconoció que en la madrugada del martes, mientras hacía el reparto de pan con su vehículo, pasó por la Vereda del Reguerón y, en un momento de la marcha, notó «un bulto» bajo las ruedas del coche. Sin embargo, según declaró también, en ningún momento imaginó que había pasado por encima del cuerpo de una persona. Más tarde, admitió, volvió a pasar por el lugar de los hechos, donde se enteró «de todas las circunstancias del atropello», puesto que vio a las Fuerza de Seguridad y los servicios sanitarios. No obstante, el individuo no reconoció en ese momento ser el autor de los hechos, sino que la confesión se produjo «a posteriori», según relató ayer el coronel de la Guardia Civil en Murcia, Arturo Prieto.

La Guardia Civil está realizando ahora una exhaustiva inspección del vehículo del detenido, para conocer la causa real de la muerte de esta mujer en Alquerías y cómo se produjo ésta. Pero conforme avanza la investigación se descarta que la causa de la muerte sea una agresión previa, aunque, tal y como reconoce el coronel de la Guardia Civil, las circunstancias en las que apareció el cadáver (desnudo de cuerpo para abajo) «son extrañas». Por tanto, todo indica que la muerte se produjo por atropello, pues las heridas que presentaba el cuerpo de la víctima podrían ser compatibles con las ocasionadas por un accidente de este tipo.

Así, el coronel Arturo Prieto insiste en que falta por aclarar «por qué estaba la mujer» en el lugar y por qué estaba en las circunstancias en las que apareció, al parecer desnuda de cuerpo para abajo. También se descarta que se trate de un caso de violencia machista, pues no hay relación conocida entre el detenido, natural de Alquerías, y la mujer.

El coronel, que informó de los hechos tras una rueda de prensa con el delegado del Gobierno, Antonio Sánchez-Solís, reveló también que un vecino informado por el propio detenido de lo ocurrido fue el que se puso en contacto con la Guardia Civil para informar de ello, tras lo que tuvo lugar la detención.