El ayuntamiento de Murcia habilitará un aparcamiento disuasorio en Ronda Oeste, junto a la plaza de La Opinión, en un solar propiedad del ministerio de Fomento, para facilitar el estacionamiento de vehículos en uno de los principales accesos a la ciudad. El Pleno aprobó ayer por unanimidad solicitar a la Administración del Estado la cesión de esta parcela, actualmente en desuso, de unos 1.700 metros cuadrados de superficie, ubicada entre la calle del Metal y la plaza de La Opinión, en los terrenos que en su día se destinaron a accesos desde la Ronda Oeste. El acuerdo alcanzado llegó a través una moción conjunta de los grupos municipales, presentada por los concejales Roque Ortiz, del PP; María Teresa Espinosa, del PSOE; Pilar Muñoz, de C's; Luis Bermejo, de Ahora Murcia; y José Ignacio Tornel, de Cambiemos.

Una vez que se obtenga la cesión de la parcela, los servicios municipales redactarán los informes técnicos pertinentes para prever el ensanche del actual viario y la construcción del aparcamiento disuasorio.

Por otro lado, el Pleno aprobó, con los votos en contra de toda la oposición (PSOE, C´s, Ahora Murcia y Cambiemos Murcia), recuperar la gestión, mediante concurso público, del Servicio de Registro, Información y Atención al Público de manera directa, con recursos propios y personal dependiente del propio Ayuntamiento. De esta manera, la moción conjunta aprobada establece que el contrato que actualmente está en proceso de contratación no sea prorrogado, una vez finalizado el primer año de vigencia.

Asimismo, salió a delante otra moción conjunta de la oposición, que también fue votada en contra por el PP, sobre la remunicipalización de los servicios externalizados. El debate de ambas mociones contó con un pequeño enfrentamiento dialéctico entre el concejal de Modernización de la Administración, José Guillén, y el concejal socialista Juan Vicente Larrosa.

De hecho, Larrosa aconsejó a Guillén que «se tranquilizara con el chupete que le he regalado» (el edil dio un chupete de caramelo a Guillén), y el concejal del PP aseguró que era «un crack».