La Universidad de Murcia (UMU) celebró ayer la festividad de Santo Tomás de Aquino con el tradicional acto académico durante el que fue investida doctora Honoris Causa la catedrática Adela Cortina. En su intervención en el acto, el rector de la UMU, José Orihuela, destacó la reposición de personal en la institución, «fijada hoy en el 100%», así como la necesidad de cerrar un acuerdo sobre docencia clínica de las titulaciones sanitarias y las ayudas a «los centros sanitarios para la supervivencia de nuestras plantillas en los hospitales vinculados». «Así debe quedar recogido en el concierto que próximamente debemos firmar», añadió, a la vez que solicitó «encarecidamente» la ayuda de «nuestra querida consejera -María Isabel Sánchez-Mora-, con tu siempre eficiente mediación con la consejería de Sanidad».

Orihuela confesó en su discurso que quiso ser rector porque es «un idealista» y «el tratar que no hubiera nuevos recortes a nuestra universidad fue una proclama esencial de mi candidatura al rectorado». «Con enorme satisfacción puedo afirmar hoy que nuestro Plan de Financiación Pluriaunal consolida que no los habrá en los próximos años», añadió.

Orihuela criticó que aún sigan difundiéndose nociones «de extrema falsedad» como que «sobran universidades públicas y que cabe hacer apuestas con un perfil más tecnológico». Al respecto, volvió a manifestar que «esto es una barbarie que vuelve una y otra vez, y a mí, como rector, no me cabe más que defender la supremacía del poder civil, tal y como hacía José Loustau y como han hecho tantos otros que me han precedido».

Por su parte, Cortina, que tuvo como padrino al profesor de la UMU Emilio Martínez, se mostró partidaria de cambiar «los malos hábitos» que aún existen cuando se plantee cualquier reforma universitaria». Entre ellos, citó la burocratización, «que está suponiendo un insoportable despilfarro de energía y una malversación del tiempo y de las capacidades que deberían dedicarse a la investigación y la docencia». «A mi juicio -señaló-, una universidad del siglo XXI se ve instada a formar ciudadanos de su tiempo, de su lugar concreto, y abiertos al mundo». La consejera de Educación y Universidades, Maribel Sánchez-Mora, explicó que siempre estará con la mano tendida hacia las universidades públicas de la Región de Murcia y destacó como positivo el grado de colaboración que existe entre ambas.

Añadió que el apoyo del Gobierno murciano siempre estará presente y mostró como ejemplo de esa atención el plan de financiación plurianual suscrito hace unos meses. En el transcurso de la ceremonia de investidura también se entregaron los premios fin de carrera y extraordinarios de doctorado. Asimismo, se llevó a cabo la investidura de nuevos doctores y la entrega de las medallas al personal de la institución que cumple veinticinco años de servicio.