El profesor Emilio Ballester decidió en febrero de 2014 cortar todos los cables de su vivienda, situada en el Puerto del Garruchal (Murcia). Con esta decisión, Ballester cesaba su relación con su compañía eléctrica y el abastecimiento de la energía de su hogar se convertía en autosuficiente. Para ello, instaló un sistema fotovoltaico, denominado AOSS: colocó unas placas solares con una potencia de 5 kilovatios y una capacidad de producción de 7.800. Un mes después, la idea, que el profesor puso en marcha en su domicilio, se divulgó en una campaña emitida por todo el país.

Emilio Ballester es profesor y además preside la Fundación Desarrollo Sostenible, un patronato que surgió en 2007 en la Región de Murcia con el apoyo de otros seis promotores para impulsar proyectos de desarrollo sostenible que ayuden a «conservar los recursos naturales» y mejoren «la calidad de vida de las personas». La última iniciativa de la Fundación fue la campaña para fomentar un modo alternativo de gestionar el suministro eléctrico que llega a los hogares. La idea se difundió bajo el título 'La autosuficiencia eléctrica es posible. ¡Corta los cables!'.

Se trata del sistema AOSS (Always Ongoing Sufficiency System), implantado con la colaboración de empresas de energías renovables. La Fundación lo define como «una herramienta de ahorro para empoderar al ciudadano». Consiste en un sistema de autosuficiencia energética que permite la desconexión de la red eléctrica y el abastecimiento de energía de una forma independiente. Y se basa en la producción de energía solar fotovoltaica. La Fundación también ofrece la posibilidad de hacerlo «poco a poco» con instalaciones simples de autoconsumo.

Un año y dos meses después del estallido de la campaña, la Fundación se congratula del interés que ha generado en todo el país y, en concreto, en la Región de Murcia: «Ha superado todas las expectativas. Más de 250.000 personas se han interesado en toda España», explican desde el patronato, agregando que «unos 25.000 curiosos proceden de la Región». «Incluso se han interesado desde algunas zonas de América Latina».

«El resultado de la campaña ha ido más allá de los objetivos que nos marcamos», admite Ballester. «Nuestro propósito inicial era sensibilizar, así como reprochar la ausencia de regulación del Balance Neto y protestar contra las compañías eléctricas. Y ahora se está convirtiendo en una herramienta para salir de la esclavitud del sistema eléctrico», comenta.

Así, la Fundación constata que en la Región hay un total de once instalaciones terminadas: dos de ellas se implantaron en dos locales comerciaeles, de pequeño consumo; y las otras nueve se instalaron en nueve viviendas. La primera fue la de Emilio Ballester; la última realizada tuvo lugar en una casa de la pedanía de Llano de Brujas, con una instalación fotovoltaica de 8 kilovatios y con capacidad para producir 14.000 al año. El propietario se dio de baja de la compañía de energía eléctrica y, según los promotores, podría ahorrase 234.720 euros a lo largo de la vida útil de la instalación solar.

«Ya no tengo sorpresas con la factura eléctrica. Ahora sé en todo momento cuánto estoy consumiendo y utilizo dispositivos electrónicos que antes no usaba por miedo a que se disparara el recibo de la luz. Además, dispongo de un suministro eléctrico seguro, continuo y de calidad, que ya no depende de los márgenes de fluctuación de las compañías. Y es un método limpio y que no contamina, algo muy importante en mi escala de valores», cuenta Ballester sobre las ventajas del AOSS.

La Fundación señala que ha recibido en todo el país unas 1.500 peticiones de informes de viabilidad, el primer paso para llevar a cabo esta instalación en un hogar. Con este paso previo, se analiza y se estudia el consumo energético de una vivienda, así como sus características técnicas y se propone un plan para elaborar una instalación. En Murcia, en concreto, se han tramitado 178 solicitudes.

Ballester lamenta que la Comunidad no haya apostado por las energías renovables. «Murcia no es solo agricultura y turismo. La Región tiene un enorme potencial energético, con una gran riqueza; además, es la comunidad con mayo radiación solar de España», detalla el presidente de la Fundación. «Es lamentable que no se hayan desarrollado políticas de este tipo para impulsar energías que no tienen efectos secundarios nocivos para el medio ambiente».