Las palomas que en la tarde del miércoles aparecieron muertas en distintas zonas de la ciudad fueron envenenadas. Así se desprende de los análisis realizados a las aves después de que técnicos de Zoonosis las recogieran de la plaza Santo Domingo, la Glorieta y Puente de Manterola, lugares donde se llegó a encontrar cerca de 150 aves muertas. Según explicó ayer a LA OPINIÓN la concejala de Sanidad, María del Carmen Pelegrín, los técnicos encargados de realizar los análisis aseguran que la sustancia utilizada para envenenar a las palomas ha sido un pesticida agrícola, en concreto, el metomilo, de la familia de los carbamatos.

Desde un principio se sospechaba de que se tratara de un envenenamiento, ya que las palomas aparecieron, en su gran mayoría, en un mismo lugar -plaza Santo Domingo-. Las demás se desplazarían tras haber sido envenenadas y por ello se localizaron en la Glorieta y en el Puente de Manterola, zonas próximas a la plaza. Una vez conocido el motivo de la muerte de estas aves, la Policía Local de Murcia va a abrir una investigación para intentar localizar al causante de estos hechos, según apuntó Pelegrín. Asimismo, destacó que el Ayuntamiento continúa llevando a cabo acciones de recogida de estas aves en distintos puntos de la ciudad, «ya que son muchos vecinos los que denuncian su presencia en balcones y ventanas, algo que resulta molesto». Sin embargo, una cosa es que esta recogida se haga de forma ordenada y legal, y otra es que «alguien decida envenenar a las palomas», además, siendo un peligro para las personas que circulen por esas zonas. Aun así, desde la Concejalía mantienen que no existe peligro para la salud pública.