Los vecinos de las pedanías de Javalí Nuevo y Sangonera la Seca llevan años sufriendo episodios de malos olores, al igual que los del municipio de Alcantarilla. La situación, aseguran, es «insostenible», por lo que hace un tiempo crearon la plataforma Aire Limpio para mostrar su malestar y conocer los niveles de «contaminación atmosférica que sufren muchos días al año».

Las protestas de estos vecinos, representados ayer en el Pleno por un grupo de la plataforma, han encontrado el respaldo de PSOE y UPyD, partidos que ayer presentaron una moción.

Ésta fue apoyada por IU y rechazada por el PP. En dicha moción, los dos grupos municipales aseguraban que, a pesar de que no haya constancia de contaminación del aire, según algunos informes, «el origen de los periódicos episodios de malos olores en estas pedanías habrá que buscarlos en la actividad industrial de los polígonos industriales de la zona», tal y como manifestó ayer la concejala socialista Susana Hernández. En concreto, según el edil de UPyD José Antonio Sotomayor, las sospechas se centran en las emisiones de gases de la empresa Derivados Químicos S. A.

Por todo ello, los dos partidos pidieron ayer en el Pleno que se solicite una serie de documentos e informes a la dirección general de Medio Ambiente, para conocer la situación real de lo que ocurre en Javalí Nuevo y Sangonera la Seca.

Por su parte, la concejala de Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá se comprometió ante los presentes a «fijar fecha y hora» para una reunión de los vecinos afectados con la subdirectora general de Calidad Ambiental, «a la que yo misma los acompañaré», añadió. De todas maneras, la concejala rechazó la moción del PSOE y UPyD, ya que «todo lo que solicitan ya se ha pedido a la dirección general competente».

Asimismo, Martínez-Cachá explicó que «desde hace unos meses hay contacto directo y lo que se ha comunicado desde la Consejería es que los vecinos deben estar tranquilos, ya que no hay datos que hagan que se preocupen por la calidad ambiental».