El ayuntamiento de Murcia actuará para evitar el derrumbe de cuatro monumentos históricos de la Huerta –la torre Falcón y el molino del Amor, que son de titularidad municipal, y los molinos de Alfatego y del Batán, de propiedad privada–, atendiendo a una petición realizada por la Asociación para la Conservación del Patrimonio de la Huerta de Murcia (Huermur), que ha pedido al Consistorio que tome «medidas urgentes» para evitar la pérdida de estos edificios, tres de los cuales están sujetos a grado de protección en el Plan General de Ordenación Urbana de Murcia o, como en el caso del Molino del Batalán, es Bien de Interés Cultural (BIC). Huermur denuncia que las cubiertas de estos monumentos se han caído, y por ello han enviado al alcade, Miguel Ángel Cámara, un escrito solicitándole la consolidación y el cerramiento en estas edificaciones «para evitar así una mayor degradación e incluso que se pueda producir algún accidente».

El concejal de Patrimonio del ayuntamiento de Murcia, Cosme Ruiz, indicó que intervendrán «para que estos monumentos no caigan en el olvido, pues el patrimonio cultural e histórico que tenemos en el municipio debemos salvaguardarlo», por lo que anunció que técnicos municipales inspeccionarán estos edificios para elaborar un informe que incluirá el gasto que supondría su recuperación y que tratarán de contactar con los dueños de los que son privados para que acometan las actuaciones pertinentes en ellos.