El servicio de préstamo de bicicletas en el campus de la Universidad de Murcia (UMU), en Espinardo, cuya puesta en marcha se espera desde hace meses, todavía no funciona a pesar de que el carril bici ya fue inaugurado la pasada semana y de que la UMU adquirió las 125 bicis para ponerlas a disposición de la comunidad universitaria. El motivo del retraso obedece a la negativa de los conserjes de los edificios del campus -unos 40 funcionarios- de encargarse del mantenimiento del servicio de préstamo, lo que ha hecho que la UMU haya contratado a una empresa.
El gerente de la Universidad, Pedro Gálvez, reconoció que este tema "fue polémico en su día", pero indicó que "ya está solucionado, pues hablamos con el personal auxiliar, que, asesorado por los sindicatos, se negaba a asumir su responsabilidad en la entrega y recogida de llaves de bloqueo de los aparcabicis y estos trabajadores han asumido que esa tarea elemental forma parte de sus funciones".
Otra cosa es que los funcionarios deban hacer frente al mantenimiento del servicio de préstamo. Las reticencias sindicales han obligado a la UMU a contratar un servicio que gestionará dicho mantenimiento, para el cual se adoptará una fórmula mecanizada en la que será necesario presentar una tarjeta acreditativa para disponer de la bici de forma gratuita, informó Gálvez, quien añadió que es "inminente" su puesta en marcha.
El préstamo aumentará el número de usuarios de la bici, según señaló el portavoz de la Oficina Verde de la UMU, José Pedro Marín, quien situó en 60 el número de estudiantes que utilizan a diario su bicicleta para ir desde Murcia a Espinardo, por lo que "sigue siendo muy necesario contar con un carril bici para acceder al campus", dijo.
