La Arrixaca es el primer hospital de la Región y el segundo de todo el país, después de La Princesa, de Madrid, que ha implantado un sistema informático para detectar precozmente a los enfermos hospitalizados que puedan sufrir desnutrición. El 60% de los ingresados sufre desnutrición, lo que perjudica su recuperación.

A partir de ahora las fichas de todos los pacientes que ingresen en la Arrixaca y que sean sometidos a análisis de sangre y de orina serán analizadas por un programa informático que, en virtud de unos criterios ya establecidos previamente por los médicos, hará una predicción de los pacientes que tienen mayor riesgo de padecer una desnutrición leve o grave durante su hospitalización.

Los médicos adjuntos del servicio de endocrinología José Ramón Cuenca y Mercedes Ferrez serán los responsables de esta nueva oferta asistencial con la que se pretende erradicar un problema que preocupa a los médicos y que resulta muy peligroso cuando se tratan de pacientes de avanzada edad y con enfermedades muy comprometidas.

Si no fuera porque se ha automatizado el proceso sería imposible seleccionar a los pacientes con alto riesgo de desnutrición, ya que diariamente ingresan en el hospital más de cien personas.

Los criterios

El jefe de endocrinología de la Arrixaca, Francisco Javier Tébar, precisó que la desnutrición hospitalaria es un fenómeno que se produce con cierta frecuencia porque los enfermos pierden el apetito como consecuencia de su deteriorado estado de salud, además de que se encuentran en un medio hostil que les puede producir estrés y ansiedad.

La pérdida de peso, la falta de proteínas y el descenso de sus defensas inmunológicas son indicios que descubren un caso de malnutrición en un paciente.

Los doctores Cuenca y Ferrez indicaron que el sistema automatizado diseñado seleccionará a los sospechosos de tener problemas de nutrición en el hospital en virtud de una combinación de datos entre los que se encuentra la edad, el diagnóstico y los resultados de las analíticas a las que se haya sometido el paciente. Se calcula que cada día se detectarán una media de 40 casos nuevos.

Según el protocolo establecido, si la desnutrición de un ingresado es leve, se notificará a su médico para que ponga remedio. Pero si se descubre una situación de gravedad será la unidad de nutrición la que someterá al afectado a un seguimiento diario y aplicará una terapia de choque mediante cambio de dieta o alimentación artificial.