El vuelco de una furgoneta y la posterior avería de un autobús en la autovía A-7, a la altura del municipio de Santomera, provocó ayer por la mañana retenciones superiores a las dos horas.

A primera hora de la mañana, concretamente a las 8.45, el centro de emergencias 112 recibió el aviso de un accidente en la A-7 a la altura del kilómetro 752 en sentido a Murcia. Se trataba del vuelco de una furgoneta y su posterior incendio. El conductor del vehículo implicado resultó herido y fue trasladado inmediatamente al Hospital Morales Meseguer de Murcia, desde donde no se han facilitado datos de su estado.

El accidente provocó retenciones de dos kilómetros, según informó la Dirección General de Tráfico, lo que impidió la labor de los bomberos de Murcia. En un primer momento, se iba a dirigir al lugar del accidente un coche del cuartel de Espinardo, pero ante la imposibilidad de llegar hasta la furgoneta tuvieron que acudir los bomberos de Molina de Segura.

Tras la retirada del vehículo incendiado, los problemas en el tráfico no se solucionaron, pero en esta ocasión por la avería de un autobús a la altura del kilómetro 749, junto a un área de servicio en el límite de las provincias de Alicante y Murcia.

Las retenciones que se registraron, según indicaban los paneles informativos de la autovía, eran de diez kilómetros, obligando a los conductores a soportar, en algunos casos, más de dos horas de atasco. En este caso la actuación fue más lenta, ya que se tardó bastante tiempo en retirar el autocar averiado, que inutilizó por completo uno de los carriles de la vía.

Durante algunos minutos, el trafico estuvo detenido completamente, hecho que aprovecharon algunos conductores para salir de sus vehículos, impotentes ante la pérdida de más de dos horas en la carretera. Posteriormente, el tráfico fue lento con paradas, hasta que se procedió a la retirada del autobús y la descongestión de la vía.